Pasapalabra está al rojo vivo. El programa de Antena 3, que cada día cosecha importantes cifras de audiencia y que es habitual que se cuele entre los espacios más vistos de la televisión en España, acumula ya un bote de casi 1,9 millones de euros y sus dos concursantes, Orestes Barbero y Rafa Castaño, luchan cada tarde por ser el primero en alcanzar la gloria y el millonario premio.

Ambos son concursantes extraordinarios y llevan ya muchos meses de duelo. El enfrentamiento viene de atrás: concretamente de 2019, cuando se encontraron por vez primera en el programa, que entonces emitía Telecinco. Allí ni Orestes ni Rafa consiguieron hacerse con el bote de Pasapalabra y, de momento, muchos son ya los roscos en los que han tenido que afrontar la resolución sin llegar a alcanzar el éxito completo.

¿Quién gana el bote de Pasapalabra?

La audiencia sabe que el bote está cerca y, por eso, cada tarde millones de españoles se congregan frente al televisor para asistir a un nuevo desafío entre Rafa Castaño y Orestes Barbero. ¿Quién ganará y se llevará el bote de Pasapalabra? ¿Aguantarán los dos o alguno se quedará por el camino y será eliminado antes de que un concursante resuelva el rosco de Pasapalabra al completo? Todo puede suceder.

El gran temor de la audiencia de Pasapalabra, que está dividida en su mayor parte según su preferencia por cada concursante, es que uno de los dos pierda el rosco, tenga que ir a la silla azul y encuentre a otro aspirante que lo elimine en esta prueba inicial. De ahí la importancia de ganar el rosco cada tarde, no sólo por el beneficio económico que ello supone (1.200 euros para el vencedor), sino por la garantía de que continuará en la siguiente edición del concurso.

Rosco brillantísimo de Orestes

En el último Pasapalabra emitido por Antena 3, el del lunes 5 de diciembre, la brillante actuación de Orestes Barbero dejó contra las cuerdas a su rival, Rafa Castaño, y lo colocó al borde del precipicio al condenarlo a la silla azul en el programa del día siguiente.

Orestes realizó un rosco extraordinario en el Pasapalabra emitido el 5 de diciembre.

El burgalés resolvió todo el rosco (salvo dos letras) en apenas tres tirones, mientras que su contrincante apenas tenía tres definiciones en azul. Así que cuando Orestes decidió plantarse con 23 aciertos y casi un minuto por delante, pasó toda la presión al otro atril, el de Rafa, que veía cómo tenía que resolver el rosco sin tiempo para meditar cada definición ni para descansar, ya que aunque pidiese Pasapalabra, al no jugar ya su rival, sólo podía saltar de letra.

Aún así, el sevillano realizó también una magnífica actuación y acabó por tener que completar sólo tres definiciones. Rafa Castaño debía arriesgarse con una de las palabras si quería, al menos, empatar. Y así lo hizo. Pero erró el tiro y se le anotó un error. Aún así, podía empatar y partir los 1.200 euros, así que se lanzó a por otra definición. De nuevo falló y ese error, ya sí, suponía su derrota en el rosco de Pasapalabra y su necesidad de tener que superar la silla azul en el siguiente programa si es que quiere continuar en el concurso.