El bote de Pasapalabra, que suma ya más de 2,2 millones de euros, está a punto de cambiar de manos. Así al menos se desprende de lo que se ha podido ver en las últimas horas, concretamente en el programa emitido el martes 28 de febrero de 2023, cuando uno de los concursantes ofreció un auténtico recital y se mostró imparable.

El aspirante a llevarse el bote de Pasapalabra comenzó con alguna duda pero luego se puso las pilas y reventó el rosco de Pasapalabra, levantando un sonoro aplauso del público presente en el plató y también del presentador del programa, Roberto Leal, que no salía de su asombro. Y no era para menos puesto que, en apenas dos turnos, se puso a sólo una palabra del bote.

Un rosco antológico

El rosco de Pasapalabra que se convertía en la puerta de acceso al bote de 2.200.000 euros lo comenzó Rafa Castaño, que venía de ganar la prueba y el programa el día anterior, 27 de febrero. El sevillano, fiel a su estilo, empezó con prudencia, pero se vio sorprendido a la primera de cambio con un error que llegó enseguida: en la cuarta definición.

El turno pasó a su rival y era ahora Orestes Barbero quien debía responder. Comenzó fuerte pero enseguida paró: a la cuarta letra, la E, solicitó Pasapalabra, ya que no estaba seguro de la respuesta. Volvieron de nuevo las preguntas a Rafa, quien otra vez pasó rápido el turno a Orestes.

Y ahí cambió todo. Orestes se puso a responder y parecía que aquello no tenía fin. Contestó y acertó 20 palabras del tirón. Nada más y nada menos. En cuestión de dos turnos había completado la primera vuelta del rosco de Pasapalabra y estaba sólo a una definición del bote de 2,2 millones de euros. La locura.

Cuando al llegar otra vez a la E en la segunda vuelta pidió cambio de turno, el plató estalló en un sonoro aplauso y Roberto Leal se hizo cruces. Impresionante. Pero Orestes seguía impertérrito, meditando la respuesta que podía convertirlo en millonario o dejarlo de nuevo al borde del bote de Pasapalabra.

Orestes ofrece un recital en el rosco de Pasapalabra con un bote de más de 2 millones de euros.

El turno regresó a Rafa Castaño y éste continuó con tiradas más o menos largas (su máximo ese día fue de seis aciertos consecutivos) mientras el otro concursante, Orestes, se mostraba extraordinariamente concentrado y pensativo.

Finalmente, tuvo que afrontar una respuesta y se decidió a probar suerte. En juego 2,2 millones de euros. "Con la E -recitó de nuevo el presentador, Roberto Leal-. Nombre de la reina consorte de Aragón, perteneciente a la Casa de Moncada, que se casó en 1322 con el rey Jaime II". Silencio absoluto... Orestes hace un gesto y dice: "Eulalia". Ni el vuelo de una mosca. Se puede cortar la tensión y, por fin, Roberto Leal vuelve a hablar: "Nooooooo... Elisenda".

Orestes se lamenta y prueba otro nombre y Rafa, por su parte, suspira aliviado. "Madre mía, hoy Orestes ha estado brillante. Ya me quedo más tranquilo". Y, aunque el de Burgos gana el programa y el sevillano tendrá que pelear por un puesto en el próximo concurso, las cosas siguen como hasta ahora y el bote de Pasapalabra aún sigue sin dueño.