Después de la hazaña de Rafa Castaño al ganar en un sólo turno el bote de Pasapalabra, que acumulaba 2.272.000 euros, las acusaciones de tongo contra el programa de Antena 3 han inundado las redes sociales hasta el punto de convertir a los dos concursantes, Rafa y Orestes, en tendencia nacional.

El malestar contra el programa ya estaba latente el jueves 16 de marzo, día en que se iba a entregar el bote de Pasapalabra. Muchos de los fieles seguidores con que cuenta el programa mostraron su disconformidad con la política de la cadena de televisión por retrasar el horario del concurso y meterlo en prime time para aprovechar al máximo la audiencia.

Así, la resolución del rosco de Pasapalabra y la entrega del bote no se pudo ver a las 21.00 horas, como habría sido lo normal, sino casi a las doce de la noche.

El problema del horario de Pasapalabra

El nuevo horario de Pasapalabra con motivo del bote fue algo que exacerbó los ánimos del público más fiel del concurso, que despotricó contra la cadena de televisión y amenazó con dejar de ver el programa porque, al anunciar el bote, se le había restado toda la emoción.

Rafa Castaño recibe la felicitación de todo el plató tras ganar el bote de Pasapalabra.

Además, al cambiar la hora, se había dejado de lado a los espectadores más jóvenes (muchos niños ven Pasapalabra cada día) y a los más mayores, que no pudieron ver quién ganaba hasta el día siguiente.

El hecho de que Rafa Castaño ganase del tirón el rosco de Pasapalabra y, con él, el bote de 2,272 millones de euros acabó de encender las acusaciones de tongo hacia el programa. Para muchos espectadores, después de cientos de programas en los que los concursantes no han podido resolver la prueba final, que de repente uno de ellos la complete en una sola tirada es algo impensable.

Acusaciones de tongo por cómo se dio el bote de Pasapalabra

Además, la estrategia que siguió Rafa, que siempre se ha mostrado extremadamente prudente al responder las preguntas del rosco de Pasapalabra y el día del bote caminó imparable hacia la victoria, sin dudar en ningún momento, ha acabado de levantar las sospechas de los que recelaban de este concursante y que, por regla general, suelen pertenecer al grupo de público que apoya a Orestes.

Los tuits hablan sin cesar de "tongo" y "escándalo" para tildar cómo fue la resolución del bote. Sobre el rosco de Rafa, aseguran que fue "muy fácil, de niño de párvulos" y, sobre todo, la principal queja hace referencia al hecho de ni siquiera permitir que Orestes jugase su rosco y pudiese haber lucha entre ambos. "No ha habido emoción, no se les ha visto pelear y no han dejado ni siquiera que Orestes respondiese a ninguna definición", se quejaba una internauta seguidora del programa.

Por todas estas cosas, para parte de la audiencia habitual de Pasapalabra y para muchos de sus más fieles seguidores, la entrega del bote de Pasapalabra estuvo el jueves sembrada de sospechas hasta el punto de que muchos de ellos no dudan en utilizar la palabra tongo en redes sociales para calificar cómo fue el momento que todos estaban esperando.