El primer capítulo de 'Aquí no hay quien viva', serie que se convirtió en todo un fenómeno televisivo, se emitió hace más de 20 años en Antena 3. Una época en la que para saber cómo continuaba la trama había que esperar una semana entera. Algo inconcebible hoy, tiempo de plataformas audioviduales que permiten hacer maratones de series en apenas un fin de semana. Consumo inmediato y sin solución de continuidad para quien lo desee.

Esta serie, creada por los hermanos Laura y Alberto Caballero, ha envejecido de la mejor forma posible. De hecho ya en su momento, allá por 2003, trataba temas sociales que siguen vigentes dos décadas después y por eso los seguidores de las peripecias de los vecinos de Desengaño 21 continúan fieles a las aventuras de Juan Cuesta, presidente de la comunidad, y sus convecinos. Además es que ha ocurrido un fenómeno curioso con esta serie: va generando nuevos adeptos entre las generaciones más jóvenes, incluso entre quienes no habían ni si quiera nacido cuando se emitía la serie en la televisión abierta.

Como muestra del fanatismo existente hacia Vicenta, Marisa, Concha, Mauri, Paloma y Emilio, el portero más famoso del audiovisual patrio, un tuitero ha querido hacer memoria a los telespectadores recordándonos una efeméride 'imprecindible': que a José Miguel, el hijo de Juan Cuesta (José Luis Gil) y Paloma (interpretada por Loles León), se le acaba el castigo que le impuso su padre en la ficción por haberse escapado del internado irlandés donde le habían enviado en apenas un par de días.

"Mañana se le acaba el castigo a José Miguel"

Tal fue el enfado de Juan Cuesta con su hijo pequeño, José Miguel (Eduardo García) por haberse fugado del internado irlandés donde le había enviado por sus constantes problemas con la policía, que no dudó en imponerle un castigo de nada más ni nada menos que 20 años, teniendo en cuenta que el capítulo 30 de la tercera temporada de la serie (Érase otra boda) donde se produce la fuga, se emitió el 8 de junio de 2005.