Los viticultores de San Martín de Unx, una villa medieval rodeada de viñedos en Navarra, vienen interpretando las uvas de Garnacha desde hace generaciones. Una uva cuyos vinos no siempre han gozado de la fama que tienen en la actualidad, de hecho, después de una época en la que era trabajada por la gran cantidad de kilos que es capaz de producir, su cultivo se fue sustituyendo desde finales de los 70 por las varietales más populares. En cambio, cuando ahora aparece un nuevo vino hecho con cepas viejas de Garnacha se genera expectación entre el público aficionado.

Anecoop y Bodegas San Martín han lanzado, en colaboración con el dramaturgo Alfredo Sanzol, director del Centro Dramático Nacional, una propuesta enológica basada en una de sus obras más representativas. «La Calma Mágica» incluye dos monovarietales de Garnacha, un tinto y un blanco elaborados a partir de una selección de los viñedos más antiguos de San Martín de Unx.

La obra teatral del mismo nombre «es un viaje iniciático que nos va a llevar a África, a los elefantes rosas, al amor, a la obsesión, a los allanamientos de morada, a las escopetas de caza, al alcohol, a la traición, a los sueños robados y a los manantiales de los que surge el agua de la vida», dice Sanzol. La Calma Mágica Garnacha tinta de 2016 está criado en barricas de roble de Navarra. El vino conserva la tonalidad amoratada que hace de ribete alrededor de su color rojo picota de capa media. El aroma tiene buena intensidad, con recuerdo a frutos rojos y negros (cerezas, guindas en licor), y evocación a plantas aromáticas (espliego), especias y pan tostado. Es ligero de cuerpo, con sensación de fruta roja fresca, agradable tanino y largo final. Un proyecto que une al mundo del teatro con el del vino, dos universos que tienen la virtud de despertar emociones en los demás.