Orlando Ortega aseguró que dejó la piel por España en la final y la medalla de plata le sabe a oro con récord mundial. «Prometí antes de salir que iba a dar los mejor de mí y he dejado la piel por España, esta medalla de plata me sabe a oro con récord mundial», dijo.

Ortega se retrasó en la primera mitad de la carrera, pero comenzó a remontar después de la quinta valla y llegó a la meta segundo con 13.17 segundos detrás del jamaicano Omar McLeod (13.05) y delante del francés Dimitri Bascou (13.24). «Al pasar la décima valla me vi en posición de medalla y me fui con todo a la meta. Cuando me vi segundo en la pizarra no lo podía creer», observó. Ortega le dio al atletismo español su primera medalla olímpica desde Atenas 2004 y lo interpretó como una forma de agradecer al país que lo adoptó. «He pasado tres años duros, he tenido que aguantar mucha presión porque no supe hasta último momento si iba a venir a los Juegos o no».

Envuelto en la bandera española, el corredor dijo que lo más difícil de ser emigrado es estar lejos de la familia y aunque reconoció no negar sus raíces cubanas, se declaró español con gustos españoles. «Cuando llegue a casa me comeré una paella, pero de carne porque no me gusta el pescado», observó