Entramos hoy en agosto, el mes más cálido para numerosas comunidades, incluidas las mediterráneas. Los primeros días se perfilan algo más moderados en cuanto al calor que los que nos ha deparado julio, pero el resto del mes está por ver. Es ésta una de las épocas del año con mayor calado en la tradición popular de interpretar los sucesos meteorológicos. El tiempo y las singularidades y costumbres de cada lugar hicieron arraigar en España diversos tipos de cabañuelas, un arte destinado a profetizar el carácter climático de cada mes del año siguiente relacionándolo con el comportamiento de la atmósfera en determinados días. De todas ellas, las más auténticas parecen ser las que se basaban en los acontecimientos del 1 al 13 de agosto. El primer día del mes se consideraba como un avance global de lo que sucedería el año siguiente, y los días 2 al 13 se asignaban a cada uno de los 12 meses del año venidero. No es ciencia, pero hay gente que aún cree en ello.

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