Sorprenden las afirmaciones del responsable de cooperación al desarrollo del PSPV-PSOE en la ciudad de Valencia, Aarón Cano, al acusar al conseller de Solidaridad y Ciudadanía de «tener como única preocupación hacerse una foto entre los escombros de Haití con la careta de solidario» (Levante-EMV, 2/06/2010). Mire, señorCano, fue la vicepresidenta Mª Teresa Fernández de la Vega quien se fotografió en Haití; usted me explicará con qué careta. ¿Puede demostrar si desde la Generalitat se envió a alguien para fotografiarse? Sí que se envió, en cambio, una planta potabilizadora que asiste cada día a 15.000 personas, kits sanitarios para 10.000 personas y también se movilizaron diez técnicos y cuatro perros especializados en la búsqueda de personas entre las ruinas. Todo a través del Comité Permanente de Acción Humanitaria de la Comunidad Valenciana (CAHE) conveniando con Cruz Roja y Farmamundi.Ignora que el Gobierno Valenciano está comprometido con Haití con un proyecto de reconstrucción en el país más pobre de Iberoamérica, tal como se acordó en la reunión del CAHE del pasado 10 de enero: un proyecto de microciudad.

Se trata de una propuesta de acción para reconstruir de manera sostenible todos los servicios como escuelas y viviendas, de una localidad concreta afectada por el seísmo. La actuación se llevará a cabo a través de diversas ONGD valencianas con experiencia en el terreno, que trabajarán de manera coordinada. Este proyecto supondrá una inversión de 6 millones de euros en cinco años, y beneficiará a más de 2.000 personas aunque, hoy por hoy, la Agencia Española de Cooperación Internacional (Aecid) aún no nos ha dicho dónde podrá ser ubicada. ¿Sabe que la Dirección General de Inmigración y Cooperación al Desarrollo impulsa, entre otros, un proyecto liderado por Unicef destinado a los niños y niñas víctimas de separación familiar a causa del terremoto?

Cuatro días después del seísmo pedimos ayuda a la sociedad valenciana, a través de la campaña «Tots amb Haití». La respuesta fue contundente e inmediata: se han recaudado más de 200.000 euros. Junto a las aportaciones anónimas de fundaciones y empresas dan la solidaria cifra que el presidente de Cruz Roja de la Comunitat Valenciana nos recordó gratamente en el acto de presentación de las casitas modulares para Haití: cerca de 20 euros por valenciano. Y por supuesto que nos hemos fotografiado junto a la planta potabilizadora de agua que la cooperación valenciana hizo llegar a Haití, o en muchos de los actos en que se recaudaron donaciones, puesto que fueron a los que asistió el conseller Blasco como máximo representante institucional de la cooperación valenciana para sensibilizar a los valencianos de la tremenda catástrofe humanitaria. Pero de ahí a decir que «sólo se preocupa por la foto entre los escombros haitianos» hay una distancia muy corta, la que media entre el insulto y la mentira, señor Cano.

Director general de Inmigración de la Generalitat Valenciana