1. Se discute si Sara Carbonero puede ser una mala influencia para el rendimiento de la selección española de fútbol, en particular, para el rendimiento de Iker Casillas, el portero que mantiene una relación particular con la periodista deportiva. Fernando González Urbaneja, presidente de la Asociación de la Prensa de Madrid, considera una falta de profesionalidad que Telecinco la sitúe a pie de campo, justo detrás de la portería española. The Times consideraba a Carbonero como uno de los posibles elementos que influyeron en la derrota de España ante Suiza. Edu Galán asegura que como Sara Carbonero no afecte al rendimiento de la selección española, mucho menos va a poder afectar a ese rendimiento Vicente del Bosque.

2. Pero si el atractivo físico de la periodista puede alterar el rendimiento de los futbolistas, ¿podrá alterar también el rendimiento de otros periodistas que se encuentren cerca de ella? ¿Es Sara una mutante X-woman cuyo superpoder consiste en alterar el rendimiento de los hombres que la rodean? Si sacamos a esta mujer del campo y la colocamos en las cabinas de los periodistas, ¿atribuiría Urbaneja a Sara cualquier error que cometieren los profesionales adyacentes?

3. De hecho, ¿podría Carbonero ser una mala influencia para mi rendimiento como columnista? Para preparar este texto he estado un buen rato buceando por internet en busca de declaraciones e información sobre el asunto. He visto decenas, cientos, de fotos de la periodista, y les confieso que me siento un poco desconcentrado y las frases no están fluyendo con la facilidad con que lo hacen en otras ocasiones. Ya sé que en los casos anteriores Carbonero se encuentra físicamente presente y en éste tan sólo lo está a través del ordenador, pero esta columna me está saliendo peor que de costumbre. ¿Será por culpa de Sara? Espero que Urbaneja se pronuncie al respecto.