Ha llegado la hora, ha llegado el momento: don Rafael Blasco ha sacado del armario el traje, en perfecto estado de revista y planchado, de las señas de identidad valencianas (another, o torna-li la trompa al chic). Como siempre, en primer lugar, saca el suyo y el del president Camps y este año, para preparar a sus chicos y chicas para la batalla electoral, la entrega se les hace tras la proyección de la película Invictus. Y así es como parece que quieren quedar, invictus e impolutus, como ese traje de valencianistas que les han entregado, pero, ¡ojo!, sólo para las elecciones y de Huelva.

Rafael Blasco, al tiempo, anuncia una novedosa iniciativa, a tratar en el próximo debate de política general, en defensa de las señas de identidad, donde, como suele hacer, se extenderá largo y tendido en hacernos ver que el peor enemigo del valencianismo es el señor Alarte y su PSPV. Pero Blasco, astuto maestro de la política electoral, asevera que su objetivo, es decir, el del PP, es defender «absolutamente y sin ningún tipo de ambigüedad la cultura, lengua y tradiciones valencianas que han forjado la Comunitat Valenciana».

El departamento de fontanería política del PP tiene ya sus líneas de actuación definidas. Pocas novedades y cambios, es la misma charca, los mismos peces y tienen el mejor cebo, parece fácil, aunque son conscientes de que las aguas de la charca están más turbias que de costumbre y los peces parecen más esquivos que en ocasiones anteriores, hay que motivar, hay que salir invictus. Una vez, creo que con cariño, Rafael Blasco comparó a los políticos de Unio Valenciana con souvenirs de kiosco, al alimón con los toritos, las sevillanas, y las banderitas españolas, por lo que entendemos que ponerse el traje de valencianista, el que acaban de repartir, es ir de souvenir temporal durante la campaña electoral.

Es curioso, los mismos que nos tachan de souvenirs, desfasados, trasnochados, o desaparecidos, son los que cada cuatro años descubren y hacen suyo el primer mandamiento de Unio Valenciana: «Defenderás al pueblo valenciano, sus gentes, su lengua, su bandera y su cultura sobre todas las cosas». Para Unio Valenciana, el reto en las próximas elecciones va a consistir en conseguir que la memoria de pez (recuerdos de 30 segundos), que parece haberse apoderado de nuestro pueblo, no vuelva a anestesiarlo y que seamos capaces de hacer ver que es posible otra forma de gobernar y otros gobernantes, con éstos ya sabemos que continuaremos en la misma charca de aguas turbias.

Presidente de Unio Valenciana