La plena aplicación de las leyes sobre basuras en la Unión Europea supondría un ahorro de 72.000 millones de euros al año, aumentaría el volumen anual de negocios derivados del reciclado en 42 000 millones más y crearía alrededor de 400 000 puestos de trabajo de aquí a 2020, según un estudio de la Comisión Europea publicado recientemente. En Compromís, como muchos otros ciudadanos, tenemos claro que la gestión de la Generalitat es muy deficiente en este aspecto. Y que el nuevo Plan Integral de Residuos que se está tramitando en les Corts —que nacerá viejo por su anticuada manera de entender las cosas— desperdicia la oportunidad de crear puestos de trabajo masivos e ingresos adicionales para los ayuntamientos.

Nosotros estamos comprometidos con una nueva manera de entender la gestión de los residuos, ya que proponemos una forma innovadora de crear empleo y empleo verde, con varios beneficios. Más recursos monetarios: sería una fuente de ingresos adicionales para los ayuntamientos, ya que, por ejemplo, se venderían los metales recogidos (aluminio y hierro sobre todo). Además, en Compromís queremos que la fracción orgánica se recoja por separado porque así, al reducir el volumen de basuras que van al vertedero, el coste del recibo será mucho menor. Una gestión eficaz necesita poca inversión, lo que es especialmente interesante allí donde la Administración tiene dificultades económicas: una planta de reciclaje es mucho más barata y saludable que otros métodos. Además, fomenta el empleo local ya que al estar cerca de la producción de los residuos, el empleo se crea cercano, o sea que es para los habitantes de la comarca y además se gasta menos en transporte (¿sabe el lector que hoy día hay multitud de camiones de la basura que van desde Valencia a descargar a Villena, a 130 kilómetros?). Finalmente, esta nueva gestión ayudaría a la autonomía energética, puesto que recogiéndonse la fracción orgánica se puede producir combustible limpio (biogás) para los habitantes cercanos y abono de calidad para los agricultores de la comarca.

Ajena a todo esto, la Generalitat fomenta la incineración tóxica —base de su gestión de los residuos— quemado recursos; son las excusas del mal estudiante, ya que no han hecho los deberes desde hace más de 10 años y ahora no sabe qué hacer con tanta basura. Un ejemplo actual de cómo se crea empleo verde: en Brasil en 1990 sólo se reciclaba la mitad de las latas. Hoy en día casi el 100%, lo que ha supuesto 170.000 nuevos puestos de trabajo para microempresas y cooperativas. ¿Sabías que la Generalitat no recupera ni la cuarta parta de las latas? En Compromís queremos que la gente viva tranquila y pueda trabajar gracias al empleo verde, para crear una nueva manera de entender la prosperidad que nos permita vivir dignamente. ¿Te imaginas cuántos empleos verdes se pueden crear?