Sobre los trabajos en la catedral de Valencia, que incluyen una excavación arqueológica, queremos dejar claro que ni tenemos que conocer, ni conocemos para nada, el calado y nivel del estudio o informe previo preceptivo que se haya podido hacer para preparar las referidas excavaciones en la fachada este (más bien sureste) de la catedral. Tampoco sabemos, ni tenemos que saber, de los criterios usados para elegir el equipo arqueológico para una zona arqueológicamente tan sensible de la ciudad.
Al respecto, sólo hemos mantenido alguna amigable, agradable, corta e informal conversación con el arquitecto director.
Los resultados de los trabajos arqueológicos de los últimos treinta años en la zona alrededor de la catedral, básicamente los de l'Almoina, son fácilmente accesibles a nivel básico y elemental en las publicaciones municipales que se encuentran fácilmente en el cercano Centro Arqueológico de l'Almoina y en la librería municipal de la plaza del Ayuntamiento. A un nivel pura y eminentemente científico, amén de en las bibliotecas, varios estudios especializados están totalmente a disposición de los interesados en los cauces habituales de internet que desde hace años usa la comunidad investigadora. No hay, pues, nada escondido.
Por lo tanto, para cualquiera que conozca un algo la topografía de la Valentia romana y haya leído un poco, queda bastante claro que la zona en la que se ha de intervenir está dentro de la ciudad de época romana republicana (entre los años 138 y 75 a.C.) y la del imperio romano (siglos I a III d.C.). Pero ya se estaría bastante lejos de lo que fue el centro monumental, el foro. De hecho, siempre se estaría más cerca de las murallas, que estarían en la parte norte de la plaza de la Reina, a la altura de las calles de Cabillers y Corregeria. Es decir, que sería un espacio periférico. No es cierto, pues, que el templo romano, cual «otro grial» se deba encontrar debajo de la catedral.
Como mucho, por debajo del ábside de la catedral, esto es, en su parte norte, se tocaría una parte de la basílica judicial romana, bien localizada en el lado sudoeste de l'Almoina, cuya esquina, con sus basamentos y una reconstrucción, se puede contemplar con una visita al lugar.
En la zona prevista para la excavación, lo más probable es que, con suerte, para la época romana puedan salir los restos de alguna casa que, además, estaría en las últimas insulas (manzana de casas) meridionales de la ciudad romana, cerca de la muralla y ya un poco lejos del foro y el templo. Edificio este que, por otra parte, habría que buscar en el extremo norte de la plaza de la Virgen.
