Opinión

Susana Golf

La importancia del verbo

Tenemos Podemos hasta en la sopa. Casi tanto como las campanadas de Canal Sur o las transparencias de Cristina Pedroche. No hay fenómeno viral „en las redes y en las calles„ que pueda compararse a la elefantiásica campaña del neonato partido. Se cuentan por decenas de millares los textos escolares, históricos, fundacionales, estatutarios, discursivos, artículos de forma o fondo y entradas enciclopédicas que citan al fundador „de Podemos y del PSOE„, Pablo Iglesias, que se repiten hasta en nomenclators y guías turísticas. Y ni qué decir del nombre de la formación, primera personal del plural del Presente de Indicativo del verbo poder. Imposible imaginar ya no documento público o privado, sino conversación común y corriente que no lo incluya. Tienen hecha más del 50 % de la mercadotecnia. Y los otros ya se han dado cuenta.

En los informativos de RTVE deben de haber agotado todos los sinónimos del diccionario de María Moliner. Y el rey, en su estreno urbi et orbi con el discurso de Nochebuena, echó mano de todo tipo de circunloquios pero logró al fin esquivar el vocablo más repetido del año clausurado, con permiso de selfi. Y también el de Cristina, por supuesto.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents