Mariano José de Larra no pudo mantener una columna tanto tiempo. El autor de Vuelva usted mañana se pegó el tiro cuando sólo contaba con 27 años de edad. Y es dudoso que iniciara sus actividades cuando apenas contaba con 5 años. La Inmensa Minoría ha alcanzado sus 22 de existencia. Desde el 1 de febrero de 1993 apenas ha dejado de salir alguna semana en estas páginas. Y es que su autor, que también es acuario, ya va por los 72. Cuando iniciaron su andadura estos artículos se publicaron Lituma en Los Andes de Mario Vargas Llosa, Cuando ya no importe de Juan Carlos Onetti, La pasión turca de Antonio Gala y Trainspotting de Irvine Welsh. No es malo el apadrinamiento de estos cuatro autores.

«Yo lo noto: cómo me voy volviendo/ menos cierto, confuso,/ disolviéndome en aire/ cotidiano, burdo/ jirón de mí, deshilachado/ y roto por los puños».

En el camino, acontecimientos varios. Una nueva generación que no sabe de un pasado reciente, que lo descubre décadas más tarde. Mirar hacia atrás, sin ira „y no como recomendaba John Osborne„ es un acto de higiene mental: lo que fue y ya no es, porque no se vuelve a empezar. La historia „como el desarrollo del proceso plástico„ tiene forma de espiral: parece regresar a sus orígenes, pero se comporta de manera diferente. ¿Qué le ha sucedido a esta columna durante este tiempo? ¿Qué ha cambiado? El período resulta lo suficientemente largo como para dar ocasión a circunstancias diversas. Mírese, si no, lo distinto que se manifiestan las cosas en todos los aspectos: el cultural, el financiero, el político, el social, etcétera.

«Yo comprendo: he vivido/ un año más, y eso es muy duro./ ¡Mover el corazón/ todos los días/ casi cien veces por minuto!»

El pulso del poeta coloca las cosas en su justo sitio. Sus palabras ofrecen una visión más cercana de lo que parece a simple vista. El poeta es Ángel González; el poema „fácil es descubrirlo„, Cumpleaños. El poeta se pone muy serio aunque tenga sus razones para ello. En definitiva, a estas alturas de la película, más de uno ha quedado en la cuneta. Entonces, te llegan a la memoria amigos, Salva Regües, José Ramón Cancer, Carlos Pérez? y personajes que han configurado el paisaje personal, Dámaso Alonso, Blas de Otero... Eso hace pensar en que, dentro de los inconvenientes que pueda ofrecer la longevidad, la conciencia „si venturosamente se mantiene„ posibilita valorar la fortuna de haber llegado hasta aquí. Un trayecto largo, cargado de experiencias enriquecedoras que registran un saldo positivo, algo tan importante para un españolito de a pie en tiempos de economía palmariamente crítica.

Resulta curioso decir estas cosas a una edad tan temprana „la de un servidor de ustedes/vosotros„, si la comparamos con los años consumidos por Manuel Silvestre de Edeta. ¿Qué sensación tendría el escultor de Lliria desde su increíble perspectiva centenaria? Y, para terminar, regresa el poeta diciendo que «Para vivir un año es necesario/ morirse muchas veces mucho». En todo caso, cumpleaños feliz, tócate la nariz.