En el mes de mayo de 1908 un grupo de mujeres socialistas norteamericanas celebró en un teatro de Chicago un acto denominado Día de la Mujer. En febrero del año siguiente, en New York, las mujeres del Partido Socialista de los Estados Unidos conmemoraron el Día Nacional de la Mujer Trabajadora, que pretendía ser un homenaje a las trabajadores textiles que el año anterior habían protagonizado una huelga contra las duras condiciones laborales que sufrían, además de reclamar una mejora salarial y el derecho al voto.

En 1910, la Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas, la organización que reunía a las mujeres de la Segunda Internacional, y que había sido creada en 1907, decidió a propuesta de Clara Zetkin aprobar por unanimidad que el día 8 de marzo sería el Día Internacional de la Mujer Trabajadora. todo gracias al tesón de infatigables luchadoras como la propia Clara Zetkin, o Rosa Luxemburgo, entre otras muchas, sin olvidar la aportación de algunos destacados socialistas como August Bebel.

La primera celebración del Día Internacional de la Mujer Trabajadora tuvo lugar al año siguiente, con mítines en los que se exigieron el derecho al voto, el acceso de las mujeres a los cargos públicos, a la formación profesional y el fin de la discriminación laboral. A los pocos días de esta celebración, el 25 de marzo, tuvo lugar un terrible hecho en New York en una fábrica de camisas. Un incendio en la Triangle Shirtwaist provocó la muerte de más de 140 trabajadoras, muchas de ellas inmigrantes. El impacto del hecho fue tal que ocasionó cambios legislativos laborales en Estados Unidos y que su memoria fuera recordada en las posteriores celebraciones del Día de la Mujer Trabajadora.

La ONU declaró el 8 de marzo como Día Internacional de la Mujer en 1975. Dos años después se convirtió en el Día Internacional de la Mujer y la Paz Internacional.

Hoy estamos ante una progresiva aceptación de la igualdad laboral aunque las mujeres no están aún en los centros de poder económico. Ana Botín lo está pero por razones familiares. Persisten algunas discriminaciones contra las mujeres madres de familia aunque en los empleos públicos las mujeres van adelantando a los hombres, entre otras razones porque estudian más. En España hay más mujeres jueces que hombres y lo mismo empieza a pasar con los profesores de enseñanza media y universitaria. En periodismo la prevalencia de la mujer es más notoria, la mayoría de los corresponsales son mujeres. En la redacción de Radio Gandia Ser hay tres mujeres por un hombre.