Este fin de semana entra una nueva masa de aire cálido sobre España, que hará subir los termómetros a valores plenamente veraniegos, impropios de la primavera. El calor llega por el sur, de forma que afectará de manera especial a Andalucía, Extremadura, la zona centro peninsular y el valle del Ebro. En el área mediterránea también se espera calor y dominio generalizado del Sol, aunque las temperaturas serán algo más suaves en las zonas costeras. En el interior se superarán los 30 ºC y entre el domingo y el lunes todavía pueden subir más, según las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).

A falta de lo que pueda acontecer en su fase final, tenemos una primavera cálida, con temperaturas anormalmente altas, a diferencia de lo que ocurrió el año pasado. Ha sucedido otras veces, por supuesto, y uno de los precedentes fue el de 2003, año en el que mayo ya trajo calores anticipados y, meses después, un verano excepcionalmente cálido, aunque eso no significa que este año tenga que suceder lo mismo. Los modelos dan a entender que a mediados de la semana próxima se cortará la entrada de aire cálido por el sur, rolando el viento a componente oeste. Pese a que esto supondrá un alivio en la mayor parte de España, habrá que ver lo que pasa en el Mediterráneo, ya que el poniente podría traer calor intenso a las zonas del litoral.