El amor es el culpable de que Risto Mejide ya no sea tan malo. El tiempo que ha estado fuera de la tele se lo ha pasado en las redes sociales mostrando su relación sublime con Laura Escanes, una joven bloguera a la que ahora llaman influencer. Tal es el pasteleo con el enamoramiento del que hacía llorar a los concursantes de «Operación Triunfo» que el nuevo programa se llama «Chester in Love».
El expublicista es otra persona y «su metamorfosis lo impregna todo», ha dicho Manuel Villanueva, director general de Contenidos de Mediaset. La víspera del estreno acudía a «Qué tiempo tan feliz» para decir que su novia por fin le ha dicho que quiere casarse con él.
Como el primer programa trataba sobre el amor, no solo en el título y en su actitud se dejó sentir el sentimiento: tuvimos que ver un vídeo a su chica titulado «Mía» que le encanta a Cristina Cifuentes, que simuló estar muy interesada en la vida privada del presentador. Mientras hablan de lo guapa que es Laura suena You´re beautiful de James Blunt.
Juntos ven sus escenas favoritas de películas de amor en una gran pantalla que sustituye a las tabletas que usan Jordi Évole o Bertín Osborne. El ritmo, el uso de la música, las fotos de la infancia y el off sobre los personajes recuerdan a «Mi casa es la tuya» pero en un plató con público y paredes transparentes para que los invitados desnuden su alma. Se acabaron las entrevistas ´faltonas´ del cínico Mejide, ahora el sensible Risto quiere conversar. Otra novedad es la participación de ´ponentes´, como la del profesor que explicó un sistema de medición de la temperatura del amor en el cuerpo humano
Con el actor porno Nacho Vidal fue más él en el lenguaje -«¿todo esto lo has aprendido follando?»- y con la charla con el cantante Miguel Poveda ya no pude. Tres seguidas son demasiadas.
Casi un millón y medio de espectadores de media siguieron la reconciliación con Mediaset después de su estampida «Al rincón de pensar» en Atresmedia. Le hizo pupa a Ana Pastor que vio como «El Objetivo» bajaba 1,5 puntos de cuota de pantalla con Oriol Junqueras. En próximas entregas se hablará de la fama o la muerte y están destripando momentos estelares como la pillada al diputado de ERC Gabriel Rufián, que lleva una chaqueta de la marca principal de Amancio Ortega al que criticó en Twitter.
Siento haber escrito tantas veces ´amor´; me he dejado llevar por el nuevo Risto.
