Donde la pobreza se asienta, la solvencia inapelable multiplica bienes. Aparece el "efecto de concentración de riqueza", propio de crisis económicas y estupros disimulados, tal como apuntó el afamado catedrático de Estructura Económica, Santiago Niño Becerra. Espacio conveniente para amasar inmuebles, acciones, proyectos empresariales y cualquier material sensible de ganancia: concesiones, accionariado, terrenos ofertados, violaciones de prácticas anti-monopolio, fraudes de quiebra. Tiempos de abierta especulación para sólidas fortunas y de rapiña para mediadores.

Hilario López Millán en su "Crónica rosa de España" desnuda a populares como Carmen Cervera, "la cuadritos colorines como se la llama ahora" escribiendo con llaneza sobre las peripecias económicas de la ex cómica: "Su matrimonio con Tarzán duró ocho años. Lex hablaba ya con sus abogados, pero su muerte repentina hizo que casi todos sus bienes y, sobre todo, la mansión "Más Mañanas" de Sant Felíu de Guíxols los heredara ella". Siempre ha sido muy de raza aprovechar la ocasión para medrar en beneficios económicos y así, según uno de los capítulos de la obra de López, la ex actriz Niní Montián, Elena Isabel de Ampudia y Montilla, marquesa de Ampudia, que "estaba metida en el régimen franquista y tenía muchas influencias", cuando venían ricos americanos a nuestro país: "de las compras caras que hacían en las tiendas se llevaba un tanto por ciento, de mutuo acuerdo con los comerciantes, igual que con los hoteles que ella previamente había buscado"; metodología del chanchullo que sigue vigente en ciudades turísticas como Valencia.

Magia oscura es la utilizada en bochornosos espectáculos de malversación llevados a cabo por personajes públicos que, vestidos de diseño o etiqueta, presumen de inteligencia y visión cebándose en la fechoría para posteriormente, salir impunes alegremente. La rama valenciana del caso Gürtel, denominada "caso Camps", demostró que el delito de cuello blanco no está reñido con la prestancia en el vestir, antes bien, lo uniforma. "Entre los países más permisivos con los delitos de cuello blanco serían Brasil y España, y no necesariamente por este orden. De hecho, en España, si has sido un buen delincuente de cuello blanco, puede que el resto de delincuentes de cuello azul y cuello blanco te den la dirección de un banco o un cargo público importante", ("Negocios 1000.com", 25/09/2014).

Negociar con la fatalidad es trueque diabólico de portentosos resultados para el fuerte, ejemplos existen hasta en el Antiguo Testamento, como el episodio de Adán y Eva, que vetados por el Supremo de comer los frutos del Árbol del Conocimiento, fueron posteriormente desahuciados por el incumplimiento de dicho requerimiento, especificado por la entidad que les financiaba su paradisíaca existencia. También en la crónica de la Torre de Babel se trasluce el dominio sobre los que tratan de salir a flote cooperativamente; así pues, cuando Yahvé vio la obra preocupado exclamó: "He aquí el pueblo es uno, y todos éstos tienen un lenguaje: y han comenzado a obrar, y nada les retraerá ahora de lo que han pensado hacer. Ahora pues, descendamos, y confundamos allí sus lenguas, para que ninguno entienda el habla de su compañero", (Génesis 11: 5-9). Cabe adjuntar a título ilustrativo de mayor actualidad, la sentencia de la vicepresidenta del Gobierno central Soraya Sáez de Santamaría: "Haremos lo que tengamos que hacer, cuando haya que hacerlo", ("Eco Diario.es", 07/10/2014)

Empresarios avezados ante un famélico escenario laboral, estratégicamente implantado, multiplican ganancias explotando la mano de obra, desvirtuando el mundo laboral; "en las democracias europeas se abre una grieta: quienes tienen trabajo intentan por todos los medios conservarlos y combaten contra los que ya no lo tienen y, probablemente, nunca lo tendrán ya. La solidaridad salarial se quiebra. Entre la función pública y el sector privado se instala una antinomia. El trabajador autóctono empieza, con frecuencia, a odiar al obrero inmigrado. La serpiente racista levanta su horrenda cabeza", así se expresa Jean Ziegler con respecto al "killerkapitalismus" (capitalismo de asesinos) en su libro "Los señores del crimen". Todos y todas necesitan continuidad de trabajo, es de la incertidumbre permanente de donde nacen los y las proscritos que desenfundan el descontento sin miedo a la coacción y represalias. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en enero del dos mil catorce, alardeó: "Antes la zozobra formaba una nube negra, ahora se respira otro aire". Señores y señoras, hay máximas que no tienen parangón.

Eckart Werthebach, rector del contraespionaje en Alemania, prevenía: "la corrupción se convierte en un fenómeno aceptado. El resultado es la progresiva institucionalización del crimen organizado. Si esa evolución prosiguiera, el Estado sería muy pronto incapaz de asegurar los derechos y libertades cívicos de los ciudadanos" (J. Ziegler). ¡Pasen y contemplen respetado público el espectáculo de los ricos cada vez más ricos! Descubran la técnica del cultivo de carencias ajenas y su posterior productividad política, mediática y económica. ¡La experiencia que les pasmará! El húngaro Harry Houdini, ilusionista de rango, cuyo primer trabajo fue el de payaso, fue un excelente fuguista, todo un modelo para estraperlistas de última versión, mientras Fulcanelli continúa siendo un enigma para los avezados del ilusionismo, al igual que "la herencia borbónica" lo es para cuantos quieren inventariar el patrimonio real: "Nada es tan misterioso como la suerte de las joyas de la Corona española, las cuales desaparecieron cuando España fue invadida por Napoleón Bonaparte en 1808 y nunca fueron recuperadas" ("Romances reales", Editorial Planeta De Agostini). Respecto al tesoro desaparecido, cabe citar el artículo en el ABC Historia (10/01/2017): "Carlos IV y su hijo (Fernando VII), empezaron a cartearse a espaldas de la Reina (la desdentada Maria Luisa de Parma), a la que se le acusó de llevare las joyas de la Corona". Cada producción de prebostes ha supuesto la salvaguarda premeditada de sus cajas a costa de inferiores "alrededor de 1627-28. Falto de dinero y de hombres Felipe IV, acudió a nobles, ciudades e instituciones para levantar voluntariamente levas a su costa", escribe Amparo Felipo de la Universitat de Valencia en el capítulo "Orto y ocaso del "Rey Planeta": el reinado de Felipe IV en la corona de Aragón" ("La Corona de Aragón. Siglos XII-XVIII"). Oligopolistas energéticos son vitoreados, recibidos con fanfarrias en asentamientos de colonización, mientras las infraestructuras sociales del entorno no existen o se deterioran.

Es importante conocer los trucos de magia de ricos, para impedir se materialicen y agiganten sentencias como la del productor cinematográfico de "Lo que el viento se llevó", David O. Selznick: "Sólo existen dos clases: primera clase y ninguna clase"