He estado en Benlloch, un pueblo donde la viticultura es ahora palanca promocional, que dicen. Había cocineros nómadas, vinos y quesos. Y eventos deportivos. Pasó mucho tiempo desde que fueron arrancadas las cepas híbridas. A esa uva descastada le llamaban aquí señorito (así, en castellano) porque era resistente al mal tiempo, a la sequía, a los hongos. Porque iba sola y mucho. La viticultura en Castellón es una cosa de pequeños rodales medio ocultos que vienen de Noé o que ya llegaron al mundo, hace cuatro días, con dote tecnológica. El alcalde de Benlloch, Àngel Ribes, pasea turistas a caballo por rutas de trashumancia.
Quieren promocionar sus rutas del vino, pero los visitantes se les pierden por falta de señales indicadoras. En Sant Jordi, en la raya del Senia, vive el único, que yo sepa, tonelero valenciano y de Benicarló era el vino que cata y canta Carlos Gardel en el tango La Violeta. Hay acciones y programas promocionales pero el Mesón del Vino que patrocina el ayuntamiento de Castellón prefirió una empresa privada a los bodegueros organizados. Cosas. Sergi Garrido, el de Clos d´Esgarracordes, una marca emblema de la zona, salió al mercado en 2009. Elabora unas cien toneladas de uva al año. Tener una explotación pequeña puede ser una ventaja, se paga el vino bueno y, más, el diferente.
Diminuta -dos hectáreas- es la finca de Montevago, Agrigento, en el suroeste de Sicilia donde se elaboran los vinos que probamos en Benlloch. Finca La Chiusa. Veranos tórridos, riegos de socorro. Las ciudades de Selinunte y Cartago mantenían un provechoso tráfico de vinos. Me gustó mucho el blanco Pietragialla, de catarratto, la uva de los Marsala. Ismael Sanjuán, que fue profesor de filosofía, es el presidente de la cooperativa de Viver y de la IGP Vins de Castelló. Me cuenta que de unos viñedos huérfanos cerca del pantano del Regajo (el elaborador fue fichado por una bodega de Mallorca) sacan, ahora, tres vinos meteóricos: Nube, Brisa y Niebla. Como Ismael está jubilado, se ocupa de los nietos, una relación que lo angeliza. Comimos muy bien en Casa Perito.
