Hoy 8 de marzo celebraré el Día Internacional de la Mujer trabajando desde mi responsabilidad en Les Corts. Sí, yo elijo trabajar, y espero que todas aquellas que lo hagamos tengamos el respeto oportuno a nuestra decisión y nadie cuestione con esto nuestro apoyo a la causa de la igualdad.

Respeto profundamente todas las posturas, a todos nos une el rechazo a la brecha salarial, al techo de cristal, a la violencia de género y a toda manifestación de intolerancia, violencia y desigualdad contra la mujer.

Respeto la huelga feminista convocada para el próximo 8 de marzo, pero no comparto que esto sea solo un asunto de mujeres, es más, creo que es un error excluir a los hombres de la posibilidad de manifestarse en defensa de la mujer.

Respeto que las conselleras del Gobierno Valenciano quieran visibilizar su respaldo a la huelga feminista, pero no comparto que ese gesto deba ser ausentarse de la sesión de control al gobierno valenciano por parte de la oposición en Les Corts. No comparto que ese deba ser el gesto, porque podría parecer más interesado que solidario.

Respeto las palabras grandilocuentes y biensonantes del Consell del Botànic en torno a la igualdad, pero pediría que pasáramos de los gestos al trabajo efectivo en beneficio de la misma. Los primeros pasos de la "igualdad botánica" fueron más que cuestionables para mí: una mesa de Les Corts copada por hombres, el atasco en el nombramiento de los miembros del Consell Jurídic Consultiu por la falta de propuesta de mujeres y un decreto de organización de la estructura básica de Presidencia y consellerías sin informe de impacto de género por "falta de tiempo". El resultado fue que el 62% de los altos cargos nombrados por el Gobierno valenciano fueron varones, quedando el 38% de los puestos en manos de mujeres y sólo el 36% de las empresas públicas de la Generalitat contaban con una estructura paritaria en los consejos de administración. Significativo es, sin duda, que este Consell cuenta con un 71% de asesores hombres y un solo un 29% de mujeres nombradas como personal de confianza; tiene Consellerías con un pírrico 17% de mujeres entre los altos cargos y en algunas de ellas (gestionadas por Compromís) el porcentaje de mujeres ha descendido respecto al último gobierno del Partido Popular.

Por eso respeto mucho los gestos, pero creo más en los hechos. No creo que los retos de las mujeres en la sociedad actual se resuelvan creando unidades de igualdad en las consellerías o pidiendo la equiparación salarial sólo en las empresas públicas sino en todas las empresas. Creo que el verdadero reto de la igualdad está en la calle. Está ahí fuera. Está en las empresas, en las universidades, en los consejos de administración y en las entidades de todo tipo.

Por eso no entendí que el Consell del Botànic eliminara, a las primeras de cambio, las líneas de apoyo para la creación de planes de igualdad en las empresas de la Comunitat que constaban en los presupuestos públicos con el Partido Popular; como tampoco comprenderé el desmantelamiento de la red de agentes de igualdad, la errática gestión de FAVIDE o la negativa del Consell a incentivar la mayor presencia de mujeres en las carreras universitarias con mayor presencia de hombres, como las ingenierías o las carreras científico-técnicas.

En definitiva les diré que, respetando como respeto a mis compañeros y compañeras de otro signo político, pediría que en materia de igualdad pasáramos del eslogan al compromiso efectivo.

Creo que la sociedad valenciana tiene mucho que aportar a la igualdad de las mujeres. Deberíamos reflexionar sobre cómo favorecer el emprendimiento femenino, erradicar la brecha salarial, mejorar la conciliación y la corresponsabilidad, incentivar la presencia de mujeres formadas en Ciencias, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas (en inglés, bajo el acrónimo STEM) y respaldar, con mayores recursos, nuestro compromiso con la erradicación de la violencia de género.

Son muchos los retos, y mucho el compromiso que debemos afrontar. Un compromiso que no comienza y termina con una huelga el día 8 de marzo.

A mí ese día me encontraran trabajando para las valencianas y los valencianos, porque es mi decisión sobre como contribuir a la igualdad.