Comandantes de la Royal Navy, hace trece años, ordenaron gritar ¡Bang! a los reclutas, en vez de disparar proyectiles; y a los de HMS Cambridge (embarcaciones y bases de tierra) "se les proporcionó un megáfono para poder disparar con más realismo", informa Jesús Hernández en su libro de curiosidades bélicas. Toda civilización ha sucumbido a la violencia; el quid de la cuestión es poseer el instrumento catapulta que posicione al individuo en el podio absolutista, o le ofrezca la codiciada ganancia. Se podría teorizar sobre que todo armamento posee una porcentual relación de identidad con los poderes fácticos que lo propician, ya sean entidades hegemónicas, como otros especímenes que no dudan en arrimarse al sol que más calienta. "La Moncloa esconde que Trump pidió a Rajoy aumentar el gasto militar. Que suba el presupuesto de Defensa hasta el 2% del PIB (bienes y servicios producidos durante cierto tiempo por un país)", ("el diario.es", 07/02/2017). Posterior a tal noticia, la agencia EFE recogió una aclaratoria cavilación, rayana en la fabulación, de la ministra de Defensa del Gobierno, Maria Dolores de Cospedal: "Por cada concesión que hacemos al miedo, más crece la amenaza. La única manera de apaciguar a una fiera es que la fiera te devore". ¡Menudo troleo! No es hipérbole afirmar que el meollo del engranaje armamentístico es planetariamente homogéneo, y a la cabeza de tal engendro siempre se instalan personas con afanes neuróticos: de poder, de riqueza, de notoriedad, de placer de dominio, ambición de honores continuos. También las secreciones endocrinas tienen su papel en la incitación al combate; sin olvidar, claro está, los complejos palpables en innumerables históricos, como el de inferioridad padecido por Napoleón, estratega que mudó el estilo guerrero de Alejandro Magno heredado a través de los siglos. Además de belicosos caudillos que tienen enredadas legendarias bichas en su personalidad, como el narcisismo y sadismo.
De las ciento treinta y seis empresas incluidas en el Directorio de la Industria Militar en España del Centro de Estudios para la Paz JM Delás, Expal Systems S.A.-Maxam Beyond Performance-, es líder en fabricación de armas y municiones. En el año dos mil siete, se constituyó la fundación Maxam. Maxam, nació de la fusión de Unión Española de Explosivos S.A. (UEE) y la Compañía Española de Minas de Rio Tinto pasando a denominarse Unión Explosivos Rio Tinto. Galdácano, localidad bilbaína, continúa siendo sede de instalaciones armamentísticas, mientras en su memoria histórica se mantienen presentes las dinamiteras: "No podían sucumbir al cansancio de una jornada de diez o doce horas, ni dejarse tentar por el sueño. En muchas fábricas se hace la mezcla de las dinamitas gelatinizadas a mano. Existía una seña bien evidente para distinguir a las trabajadoras de la dinamita, el tono amarillento de los brazos que removían la pasta pegajosa; las dinamiteras no los ocultaban debajo de las mangas, alardeaban de ellos y se jactaban de salir vivas todos los días del subterráneo", ("Trabajos duros de la mujer", Eliseo Bayo)
Fundación Maxam es patrono de la Fundación Onuart, de financiación pública-privada, a la que: "en total de cuatro años, el gobierno socialista de Zapatero destinó 11,5 millones de euros a subvencionarla", ("el confidencial.com", 28/03/2013). Su web refiere: "La Fundación ONUART tiene como misión potenciar el valor del arte como catalizador para el diálogo". ¿Diálogo? Peculiar diálogo cuando entre los patronos empresariales cuenta con Indra (misiles, aviones no tripulados, radares, helicópteros), empresa incluida entre los cien principales productores mundiales de armas, y que en los años noventa pasó a manos privadas. La presidencia de Onuart recae en Miguel Ángel Moratinos Cuyaubé (PSOE), ex ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación (2004-2010) durante el gobierno de Rodriguez Zapatero: "Según el último informe remitido al Congreso, el ejecutivo de ZP vendió máscaras antigás, trajes blindados, sustancias químicas (lubricantes, fluoruros, sulfuros, cianuros), fusiles, carabinas revólveres, pistolas, ametralladoras, silenciadores, cargadores, visores y apaga fogonazos", publica el "Diario Ya" en dos mil nueve. "La Fundación Onuart, creada en 2007 por el Ministerio de Asunto Exteriores para gestionar la remodelación de la sala de los Derechos Humanos, en la sede de las Naciones Unidas de Ginebra, justificó como gastos relacionados con la obra facturas que nada tenían que ver con el encargo realizado expresamente al artista mallorquín Miquel Barceló. El Tribunal de Cuentas, ha detectado tres facturas por un importe total de 89.906 euros que son, en realidad, gastos ordinarios de la propia entidad", informó el periodista Daniel Forcada. Precedentemente, en mil novecientos treinta y seis, España había donado los murales de la Sala del Consejo de la antigua Sociedad de Naciones, pintados por José María Sert y Badía, llamado Jojo por Missia, amante y posterior mujer. Sert "era un hombre bajo y peludo, con una energía extraordinaria y que hablaba francés con un acento que encantaba a Gabrielle (Coco Chanel). Procedía de una familia catalana inmensamente rica. Sert era un hombre muy minuciosos, aficionado a contar historias crueles y extrañas"; Axel Madsen, autor de la biografía de Coco Chanel, en un capítulo relata la confesión de Roossy (Roossadana), que al levantarse el jersey mostró unos terribles morados a su amiga Chanel, hematomas obra de un Jojo (Sert) enfurecido porque lo abandonaba: "Mira el último regalo de Sert". El artista, en sus viajes a Madrid, "solía cultivar sus relaciones con Marie-Ursel Stohrer, esposa del embajador de Hitler en España".
Moratinos ha sido embajador en Israel, uno de los países a los que vende armas Maxam; la firma, a finales de marzo de este año, ha presentado en IWA Outdoor Classics ("Alto rendimiento en deportes específicos, actividades en la naturaleza y protección de persona"), ¡pero si son armas! "sus últimos desarrollos en cartuchos para caza, tiro y fuerzas del orden"; para la caza del faisán, ave galliforme inspiradora de formas arquitectónicas ancestrales, la caza del pavo, ave símbolo de la virilidad, y los cartuchos Rio, "que a través de sus distintas marcas vende cerca de 600 millones de cartuchos en más de 100 países cada año", ("Trofeo, Caza y conservación"). En Malatya (Turquía), hace pocas semanas, dicha empresa inauguró una de sus nuevas instalaciones de Riogel y nitrato amónico. El ex ministro cuenta en su haber condecoraciones harto significativas y evidentemente singulares: Orden del Príncipe Yaroslav el Sabio de segunda clase (Ucrania), Orden de la Cruz de Terra Mariana de 1ª clase (Estonia) y la de Gran Oficial de la Orden de las Tres Estrellas (Letonia). "Rumbo a Letonia. Y España entró en la Nueva Guerra Fría. Hoy los españoles acuden a la llamada de la OTAN para disuadir a Putin de más tentaciones imperialistas como la de Ucrania", ("guerrasposmodernas.com", 28/04/2017). "¡Vienen los españoles!: tanques del ejército de España, desplegados en Letonia para disuadir a Rusia", es el titular de un artículo difundido en junio del pasado año dos mil diecisiete, en el soporte digital RT, fundado por Mikhail Lesin; "el antiguo ministro de prensa ruso murió de un golpe en la cabeza, también lesiones provocadas por un objeto contundente en cuello, torso, brazos y piernas" ("bbc.com", 11/03/2016); y el jefe de prensa presidencial ruso, Aleksey Grómov
Armas que asesinan la vida, como esencia de su propia razón de ser. Las armas no previenen la violencia, son su materialización. En la Grecia antigua, la infantería ligera innovó tácticas en el campo de batalla mediante lanzas cortas, hondas y flechas. Filipo de Macedonia instauró la infiltración de espías. Arquímedes, ante el asedio romano de Siracusa, ideó un sistema de espejos cóncavos que incendió el velamen de la escuadra invasora. Gran hacha de combate asida con ambas manos, espada larga de doble filo, lanzas y arcos eran armas ofensivas vikingas. Sin duda, ni el tiempo, ni el espacio han favorecido la evolución del ser humano hacia la Paz, antes bien escenifican su malévola degradación. "Todas las guerras, antiguas y modernas, convierten a la población civil en las principales víctimas, cuantitativa y cualitativamente, pero sobre todo las guerras civiles posmodernas hacen del ciudadano carnaza preferida para el cazador", ("La aznaridad", Vázquez Montalbán).
