La economía global ha favorecido el incremento del transporte marítimo en las últimas décadas. Casi el 90 % del comercio exterior de mercancías de la Unión Europea se realiza a través de las autopistas del mar, según la Agencia Europea de Medio Ambiente. Bruselas trabaja hace varios años para avanzar hacia una regulación comunitaria con el objetivo de limitar las emisiones de efecto invernadero tanto del sector marítimo como del aéreo ante su constante aumento. De hecho, la Organización Marítima Internacional advierte que el vertido a la atmósfera de dióxido de carbono (CO2), los óxidos de nitrógeno (NOx) y los óxidos de azufre (SOx) podría dispararse hasta un 250 % en 2050, con lo que esta modalidad logística generaría el 17 % de las emisiones globales. En este contexto de compromisos y retos para frenar el calentamiento global y el cambio climático, la naviera Baleària ha puesto a flote el buque Hypatia de Alejandría, en homenaje a la científica pionera en las ciencias matemáticas y considerada la primera mujer astrónoma. Será el primer ferry propulsado con gas natural en el Mediterráneo, según la compañía, que prevé que pueda operar en Baleares a principios del próximo año. Este será el primero de los dos smart ships que la naviera impulsa con la inversión de 200 millones de euros y que permitirá reducir un 30 % las emisiones de CO2, hasta un

85 % las de NOx, e incluso, eliminar los vertidos atmosféricos de azufre y partículas en suspensión, cuya incidencia provoca problemas importantes en la salud pública.