Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Una cita placentera

De dice, y es cierto, que el perfume es un homenaje al sentido del olfato. Yo diría que, por lo menos, a tres más: a la vista, porque los frascos que lo contienen son muchas veces pequeñas obras de arte que se agradece contemplar. Al oído, por el ligerísimo rumor que produce cuando se presenta en forma de aerosol. Y al tacto, porque (creo que fue Chanel quien dijo aquello de que hay que perfumarse «donde quieras que te besen») al esparcirse sobre cualquier zona del cuerpo, la convierte en resbaladiza pista del deseo. Un amigo mío afirmaba: «En la piel perfumada patinan las estrellas». Dicho esto, no hay que sorprenderse. Si se realizan catas de vinos, o de aceites, o de arroces, ¿por qué no ha de haber catas de perfumes? Una de ellas se ha celebrado hace unos días en torno a una fragancia, «Narciso Rodríguez for Her» que está alcanzando máximos niveles de éxito. Esperanza Pintado, directora de «Shiseido», fue la encargada de mostrar, descubrir y analizar los ingredientes y pormenores de este perfume, que es en estos momentos el gran abanderado de Narciso Rodríguez, diseñador de reconocida personalidad, que en nuestro país dejó muy buen recuerdo de su etapa al frente de la línea femenina de Loewe, desde 1997 hasta 2001. Rodríguez, neoyorquino de ascendencia cubana, con largo historial de trabajos en firmas como Donna Karan, Calvin Klein o Cerruti, ha logrado el más alto prestigio con sus propias colecciones, de aparente sencillez basada en un sofisticado refinamiento. Un estilo que se refleja en el carácter de «For Her», el perfume que se sitúa entre los más solicitados en el mundo. La peculiar cata tuvo lugar en «Rocket Space» ante una escogida asistencia en la que figuraban la diseñadora Soraya Plaza, la estilista Pachi Viñoles y, masivamente, una tropa de blogueras/os: Lau Closet, Nuria Parré, Mavi Trapos y Daqui Gómez, Andrea Catalá, Marta Vilar, Elena Falcó, José Tousette, Lourdes Pérez, Patricia Cerveró y Laura Bernal. Testimonios de esa moderna y, por lo visto, nutrida profesión. Hay que resaltar que el evento -organizado por Ana Gayoso, de «La Champanera» y Lorena Oliver, de «Araventum»- sumó otros alicientes. Tan relevantes como los elegantísimos trajes de novia de una firma que reverdece el nombre veterano de Chus Basaldúa realzados por las evocadoras joyas antiguas y «vintage» de Marfil Joyeros en su nueva línea «Heritage». Que acompañaron las hermanas Begoña y Paloma Marfil. En resumen: un placer para todos los sentidos. Incluído el del gusto, bien satisfecho con un exquisito cóctel servido por «Catering 5». «For Her»; para Ella. Para todas «ellas».

Compartir el artículo

stats