Hace más de 30 años que formamos parte de ese proyecto político que es, aunque no sabemos por cuánto tiempo, EUPV y EUIB. Siempre participando con nuestras reflexiones en las propuestas para transformar esta sociedad patriarcal, insolidaria y cada vez más desigual.

Es cierto que en estos momentos de la postverdad, de la política líquida y la historia evanescente, cuando la izquierda se ve desbordada por las contradicciones de un capitalismo global que pone en cuestión los derechos alcanzados, se generan tensiones. No obstante, lo razonable sería que, ante situaciones complicadas, no se criminalice la crítica.

EUPV y EUIB son formaciones políticas soberanas que se federan libremente a IU con competencias y estructuras propias y lealtad al proyecto federal, y así deben continuar.

No vamos a entrar en el para qué; pero sí en qué proponen los documentos presentados por la dirección de IU para debatir en la Asamblea Político y Social del 12 de mayo. En el texto de estos documentos aparecen varias propuestas que nos parecen inaceptables:

-Antes de la próxima Asamblea Federal, las Federaciones deberán, o bien disolverse o modificar el nombre del partido que tengan registrado, desapareciendo las siglas de IU.

-Racionalización de la gestión económica: Es necesario resolver la deuda de IU, modificaremos los estatutos para señalar mecanismos que permitan centralizar recursos, si así fuera necesario.

Es curioso que, desde IU, que dice defender un modelo federal, se opte por un modelo de organización fuertemente centralizada. Ante este despropósito, algunos militantes y simpatizantes de IU hemos firmado un manifiesto denominado Por una IU soberana, democrática y al servicio de la ciudadania, por las siguientes razones:

-La dirección de IU está realizando una propuesta antidemocrática. Se pretende una modificación estatutaria que se enmascara con falsas excusas jurídicas y que no va ligada a un debate imprescindible, que nosotros reclamamos, sobre la situación política general y sobre el desarrollo de la convergencia.

-Esta propuesta vulnera el método de democracia participativa aprobado en la XI Asamblea, y que recogen los estatutos de EUPV y EUIB

-La propuesta elimina, casi por completo, el control de la dirección ejecutiva, desaparece la dirección política y se hace descansar todo el control en una Asamblea Político y Social, que es manifiestamente inoperante.

-La desaparición de las personalidades jurídicas de las federaciones solo puede entenderse si creemos que la Dirección Federal se quiere reservar la última palabra sobre las candidaturas municipales y autonomías.

-El vaciamiento democrático que representan los puntos anteriores no ayuda a la política de convergencia, salvo que dicha convergencia se haga en términos de subordinación. Para favorecer la convergencia, necesitamos una IU soberana y en la que haya mucho debate político y democrático.

Esta es la opinión que, desde la lealtad al proyecto federal de IU, estamos haciendo llegar a Alberto Garzón, en defensa de la independencia, la presencia y la necesidad de IU , y de EUPV y EUIB como proyectos políticos con identidad, autonomía y cultura política propia.