Esta semana pasada la Comisión Europea ha anunciado nuevas medidas para reducir los plásticos que terminan en el mar, proponiendo diferentes medidas para reducir el uso de los diez productos de plástico de un solo uso que se encuentran con más frecuencia en las playas y mares de Europa. Estos diez suman el 70 % de todos los residuos marinos.

Cabe destacar que la propuesta europea nace por una creciente preocupación por las basuras marinas y por los plásticos de un solo uso. Un extremo que ya recogió hace meses el borrador de la nueva Ley de Residuos y Suelos Contaminados que prepara el Govern de les Illes Balears y que este mes será aprobado por el Consell de Govern, como paso previo a su entrada en el Parlament.

La propuesta de la Comisión es la de prohibir la comercialización de productos de plástico de un solo uso, siempre y cuando haya alternativas asequibles.

En el caso que no, el objetivo será limitar su uso imponiendo un objetivo de reducción del consumo a nivel nacional; aplicar requisitos de diseño y etiquetado e imponer obligaciones de gestión y limpieza de residuos a los productores. «Esta Comisión prometió que iba a ser ambiciosa en los grandes temas. Los residuos de plásticos son, sin lugar a dudas, uno de esos grandes temas y Europa tiene que actuar unida para hacer frente a ese problema, ya que esos residuos acaban en nuestro aire, nuestros suelos, nuestros océanos y nuestros alimentos», explica el vicepresidente primero Frans Timmermans, responsable de Desarrollo Sostenible.