ualquier lector de esta columna se habrá dado cuenta de lo anómalas que están resultando estas últimas semanas, con episodios tormentosos casi todos los días en algún punto de la Península Ibérica y unas temperaturas inusualmente bajas para la época. Esta situación viene dada por la repetición de una configuración de anticiclones y borrascas que facilita la aparición de borrascas frias aisladas y Depresiones Aisladas en Niveles Altos, también conocidasestas últimas por sus siglas: DANAs. Así, debido a la posición del anticiclón de las Azores; situado más hacia el oeste de lo normal y a una zona de altas presiones, ubicada sobre el continente europeo, tenemos un pasillo por el que en las últimas semanas no dejan de producirse descuelgues de embolsamientos de aire frío en altura (DANAs) responsables de la inestabilidad atmosférica que nos viene acompañando.

Si echamos la vista atrás los últimos meses también se ha producido situaciones de repetición de patrones atmosféricos con importantes inercias en cuanto a la repetición de situaciones meteorológicas. Así el pasado mes de febrero y hasta finales de abril entramos en una dinámica de ponientes, con un Anticiclón de las Azores prácticamente desaparecido y con el paso de borrascas por el centro y norte de la península, regando de forma abundante la vertiente Atlántica de la península e incluso Catalunya y las Islas Baleares. Mientras al sur de Tarragona, Comunidad Valenciana, Murcia y Almería; donde los vientos de componente Oeste son terrales, sufríamos una falta de agua realmente acuciante, puesto que el de 2017 fue uno de los otoños más secos que se tiene registros en dichas zonas. Y, ¿porque fue tan seco el trimestre otoñal ya no solo en la vertiente Mediterránea, sino en toda la península Ibérica excepto las cuencas Cantábricas? Pues nuevamente por un patrón en la configuración meteorológica que se repitió desde el mes de octubre hasta el mes de febrero. En este caso el anticiclón de las Azores se situaba o bien encima de la Península Ibérica o al Este de las Azores, impidiendo el acercamiento de inestabilidad alguna a nuestro territorio.

Las inercias meteorológicas siempre han existido, pero llama mucho la atención que desde el pasado mes de septiembre solo se hayan dado prácticamente tres patrones de tiempo y la tozudez de los mismos. En cuanto lo que nos espera en las próximas semanas, el verano es implacable en nuestro clima Mediterráneo, así que el patrón de tiempo veraniego con la estabilidad del anticiclón de las Azores está garantizado. Así, sólo es cuestión de días o semanas que se establezca el ´buen tiempo´ por nuestros dominios para quedarse una temporada.