Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Democracia interna

recuerdo como viví desde la lejanía y con cierta envidia las primarias demócratas de 2008, en la que participaron hasta ocho candidatos, aunque finalmente la terna se centró en Hillary Clinton y Barack Obama, quien fue el ganador por un estrecho margen de un 3 %. Posteriormente, vivimos su camino hasta el triunfo y su llegada a la Casa Blanca.

Me pareció un gran triunfo de la democracia y un ejemplo a seguir por todos los partidos políticos, por ser un modelo de participación interno, en el que los partidos abren puertas y ventanas, se crea un sano debate con las ideas de cada candidato y se da la voz y el voto al afiliado. Además, el ciudadano puede conocer mucho mejor al candidato que posteriormente se presentará a las elecciones, ya que el partido se abre a la sociedad.

En España hemos vivido primarias en diferentes partidos y con diferentes resultados, desde las que han sido modélicas, hasta las que solo son convocadas cuando le interesa al partido y hasta las que han sido amañadas. Este día tenía que llegar al primer partido de España y en esas estamos. Tras la aprobación en los estatutos del partido, ya vivimos unas primarias en la Comunitat Valenciana, donde salió elegida por una gran mayoría, la actual presidenta, Isabel Bonig, y ahora, las primarias llegan al PP nacional.

El primer partido de España en votos y en afiliados está viviendo un momento histórico y desconocido para sus militantes, es una oportunidad única para dar la batalla de las ideas, para la regeneración, para abrirse ante la sociedad española. Creo que estas primarias deben de ser modélicas y mediáticas, en las que la ciudadanía pueda conocer el proyecto y el equipo de cada candidato a presidir el Partido Popular.

Frente a quienes apostaban por hacer primarias pero con una candidatura única, ha quedado demostrado que este partido quería participar, quería votar y quería aportar. Al final se han presentado siete candidaturas. Me parece fantástico que tantas hayan dado el paso de presentarse ante los afiliados y ante la sociedad española para presidir el PP. Espero también que se produzca un debate sano y que gane quien gane, la unidad siga siendo la seña del Partido Popular.

España necesita un centro derecha fuerte y limpio, que pase página a toda la gente que se ha aprovechado de su puesto para obtener beneficios personales. Un centro derecha que tenga respuesta ante todos los desafíos a los que se enfrenta nuestro país, un partido en el que quepan todas las sensibilidades, que represente al sentir mayoritario de los españoles y que esté preparado para presentarse ante los ciudadanos como la mejor opción de gobierno. Es tiempo de debatir y de votar, aprovechémoslo y disfrutemos de las herramientas que no ofrece la democracia.

Compartir el artículo

stats