¿No hay nadie que pueda detener a Donald Trump? ¿Dónde están los organismos internacionales como la ONU o la OEA para denunciar a la administración estadounidense por el trato dado a los menores que han sido enjaulados y separados de sus padres. Alrededor de 3.000 niños, según las últimas cifras. Uno no da crédito a las imágenes que nos llegan. Pero, qué locura es esta! No podemos permitir como ciudadanos que ocurra algo así en pleno siglo XXI.

Se ha prohibido a los periodistas tomar imágenes e informar de lo que está ocurriendo en la frontera con México y de la situación de los migrantes que son detenidos y dirigidos a campos de concentración antes de su expulsión. De muchas de estas personas no se sabe absolutamente nada porque no se permite a los medios de comunicación informar sobre ello.

¿Qué más tiene que ocurrir para que el mundo reaccione ante esta nueva vejación del presidente Trump? De verdad, vamos a seguir esperando de brazos cruzados?

La política migratoria de Trump no solo es cruel e inhumana sino que atenta claramente contra los derechos humanos. Quien mejor definió al personaje que hoy ocupa la Casa Blanca fue el actor Robert De Niro durante la entrega de unos premios cinematográficos, cuando afirmó "que le jodan a Trump".

El silencio de la comunidad internacional clama al cielo. El Gobierno de Matteo Salvini en Italia ha creado un censo para los gitanos. Luego serán los homosexuales, los judíos. Les suena esto? No hace demasiado tiempo que ocurrió. También el gobierno ultranacionalista húngaro de Viktor Orbán ha dictado una orden para encarcelar a quienes faciliten información para pedir asilo o ayuden a los inmigrantes en situación irregular.

Los brotes de racismo van aumentando con presidentes populistas y xenófobos como Trump, Orbán o Salvini.