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El mercado de fichajes

Nado que el segundo de Aznarín es campeón del mundo de lanzamiento de huesos de aceituna, Cultura se ha lanzado a la yugular del ayuntamiento socialista de Cieza por no aumentar la asignación y se ha empeñado en darle el oro y el moro a los organizadores del torneo mientras el paisano Teodoro García se deja los maxilares en arrojar veneno sobre todo bicho viviente, ya sea parlamentario izquierdoso, plumilla poco de fiar o jueza tendenciosa con tal de salvar de culo del señorito. Tampoco debe entender el secretario general con marketing y gestión de proyectos por la George Washington University que al catedrático Álvarez Conde, urdidor de la trama en la que mintiendo y dejándose querer todos ganan, no se lo rifen ni se lo apropie ya Trump para sus fines. La pretemporada, que viene de aúpa.

Todo ello con el cis haciendo gracietas. Pedro Duque, que lo único que ha podido hacer es anunciar que piensa poner a España en órbita, se sale del mapa en el barómetro gracias a que sigue pensando en Marte y a que los rivales no sacan cabeza. Tras hacerse viral por cuestionar la llegada del hombre a la Luna, es más que probable que Casillas no crea que exista Pedro Duque como tal ministro, ahora que andará crecido viendo como todo quisque quiere desmarcarse de Florentino. Quienes están en posición de hacerlo, claro.

Pero, para cancerbero, Pedro Sánchez.

Hace cuatro días estaba desahuciado y su partido, que amenazaba con volver a la clandestinidad, acaba de romper la barrera del sonido elevándose a velocidad supersónica, según la elaborada cocina. Si alguien no creía aún en la erótica del poder, que espabile. Y una vez que se evapora, baste con decir que hasta a Marhuenda se le ve desganado.

Siguiendo con planteles históricos, ¿saben qué ha hecho Bielsa con el del Leeds? Ponerlo a recoger basura tres horas y que valore lo que hace un seguidor a fin de pagarse la entrada. Con la estrategia defensiva empleada en otras conductas, está claro. Ha de ser un loco el que ponga cordura.

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