Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Estreno en el nacional

Con la presentación de Quim Torra en el Teatre Nacional de Catalunya- mientras el Parlament no tiene sesiones desde principios de julio, al interrumpirse de pronto la legislatura, por divergencias con sus socios- el show se ha trasladado a otra dimensión. Si ya hay quien hablaba de «ficción» y se remitía a una etapa de la política como «simulacro» (en el sentido que le da Braudillard), ahora todo es mercadotecnia y espectáculo.

Ha coincidido con la presentación de los nuevos programas (y en algunos casos de los equipos) en varias cadenas de televisión, luego del lapso del verano, lo que relaja mucho. Estaban todos pensando cómo convencer a la clientela, y por lo visto, los políticos también(o sus asesores) con el resultado de lanzar la temporada otoño -invierno con nuevas propuestas, o no tan nuevas según apuntan los expertos, que ven que se repiten, cuando no, corrigen las anteriores con retoques de forma o fondo.

¿Qué dirían si Pedro Sánchez se trasladara al teatro María Guerrero para presentar su versión2,0 de la inhumación de los restos del dictador? O si se llevara una sesión a Las ventas para dirimir el tema del techo de gasto, o su intento de cambiar la decisión que tomó el PP y Mariano Rajoy en 2012 para que fuera el senado quien pueda vetar una decisión sobre el presupuesto. Los populares de Pablo Casado quieren que sea artículo de fe y que sea equivalente a la Constitución (mientras hace una fundación sobre la transición y la concordia).

A este ritmo me veo a Ximo Puig trasladando una sesión de las Corts al teatro romano de Sagunt para pedir una nueva financiación o haciendo la declaración del 9 d´octubre en una catafalco en la Porta de Serrans, con estilo fallero y populista. ¿Quién lo impide? Animaría mucho el ambiente y llevaría a la calle la discusión. Los premios de las artes escénicas pueden darse en las cortes. Es más actual y quevedesco.

En la vuelta al cole o de las ofertas en otoño hay mucho de manufactura. Torra hace propuestas que contradicen lo que dijo en la cámara y lo que han mantenido durante un año. Si pide un referéndum pactado es que el anterior no era válido y si no lo fue, por defecto de forma, o por falta de validación, los presuntos resultados no sirven ni de sondeo. El que reclama, sería con todos los requisitos reglamentarios. Y eso claro no le va a ser fácil conseguirlo, porque le han dicho que la Constitución vigente no lo prevé. Insistir es un arte de persuasión. Por ello dice que no renuncia a nada. A Dios rogando y con el mazo dando, se va a ver mucho este septiembre de conmemoraciones.

Que el estreno de la obra ha sido un éxito, no cabe dudarlo, fue en todas las portadas y abrió los telediarios (con caras nuevas). Y daría pie para que Albert Boadella pida ahora que le dejen el parlamento.

Todo ello en un día en que se conocían los datos del paro y la afiliación a la Seguridad Social y se descubría que todo es provisional, el trabajo y la seguridad. Que lo normal es el vaivén y la alegría provisional y precaria como el empleo. Y es que los datos estructurales son lo importante. Y más de 3 millones de parados no es algo que pueda olvidarse ni resolverse con facilidad. Es parte de la herencia de la crisis y viene de más lejos. Sólo con ocio y turismo no se resolverá. Pero mientras hay reuniones serias sobre el particular le ruido es sobre otros temas con resonancias más emocionales.

Compartir el artículo

stats