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El cuento del negro

Como Madrid ya tiene bastantes problemas en Cataluña ha tomado nota del revolcón judicial sufrido en Flandes por el caso Valtònyc, el rapero absuelto por nuestros socios belgas, y ha comenzado a taponar vías de agua. Lo demuestra otra sentencia, mucho más benigna, dictada en casa (y que no implica ingreso en la cárcel) contra una especie de consorcio de raperos, La Insurgencia, que aclamaban al Grapo, ya ves tú, a estas alturas. En apoyo de la lenidad se invoca un argumento tan lógico como poco usado: la apología del terrorismo es traca china cuando ya no hay terroristas.

A veces pienso que nadie lloró más que el PP la retirada de ETA. Le daba la tarea hecha: todos, salvo ellos, éramos etarras en cuanto bajábamos la guardia. Debe ser un mal pensamiento.

Por otra parte la apología del terrorismo, delito que fue exhumado de remotas jurisprudencias, es como la blasfemia o el toreo de salón. Ciscarse en Dios es fácil, lo que tiene mérito es lo de Lucifer: con un par. Del toreo de salón no hace falta glosar nada que no sepan. Se comprende que se recurriera a esta figura jurídica cuando ETA era la pesadilla de nuestra democracia, causaba muchísimo dolor y tenía un cuerpo de alféreces de la escala de complemento, pero ese tiempo, por suerte, ya pasó.

En los países de tradición democrática, los negros del Black Panthers, pongo por caso, hablaban de insurrección armada en EE UU (como los maoístas en el París del 68), pero cuando empezaron a asaltar bancos, fueron suprimidos sin compasión, ´retirados´ como los replicantes de Blade Runner. Después los negros más levantados probaron suerte con el Islam, que como forma de tocar las pelotas blancas tuvo resultados muy desiguales. Y luego vinieron los negros del gangsta rap, a quienes les gustaba cargar pistolón blue steel 44 y que fueron más letales para ellos mismos que para la policía. Al final y pese a Obama, comenzó a resultar increíblemente fácil que un vecino negro desarmado acabase baleado por un policía blanco algo histérico. Y así acaba el cuento.

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