"Por devolver el sentido artístico a la masa pueblo, nos encontramos con el concepto de "arte vida", escribió el dramaturgo ilicitano (Alicante) Alberto Miralles Grancha en "Nuevos rumbos del teatro". Acorde a tal sentencia, del canto coral en el siglo XXI plenamente encumbrado ¡hay que hablar! ¡su fórmula es definitiva! Recientemente se celebró en la sorprendente sala Alfons el Magnànim del Centre Cultural de la Beneficencia, el "XVI Dia Valencià del Cant Coral" -como dijo Miguel de Cervantes, "Por una pequeña muestra podemos juzgar la pieza entera". Cada interpretación patentizó la potencia alcanzable al tejer ligazones artísticas. ¡Los coros fraguan colectivos ajenos a discursos tóxicos! Y. Escuchando grupos de voces fusionadas, hasta el público más reacio e inexperto se embelesa.

En un atardecer otoñal (catorce de octubre), lo que no fue óbice para lograr pleno absoluto, primeramente actuaron los representantes de coros castellonenses, la Coral Polifónica Serra D´Espadà (La Vall D´Uixó), que con sobria puesta en escena, entrega y calidad inspiraron respetuosa escucha. Seguidamente, por Alicante, tomaron posiciones en las eventuales y peligrosas gradas, el coro concertante de mujeres y hombres de la Coral Ibense (Ibi). En tercer lugar, también con apoyo instrumental, salió a la palestra el excitante grupo mixto de intérpretes adolescentes proveniente de L´Eliana (Valencia); voces y coreografía de la Escola Coral de L´Eliana hechizaron el ambiente. ¡Juventud valiosísima! ¿Y qué mundo heredan? ¡Los rastrojos de la codicia instaurada! Como declaró Emilio Lledó: "Lo peor es que un indecente con poder decida sobre la vida de un pueblo", ("www.lne.es", 26/10/2016). Por último, la presencia aplomada del Coro FECOCOVA (Federación de Coros de la Comunidad Valenciana), redondeando una experiencia sensitiva ampliamente ovacionada. En palabras de A. Glasgow: "El aplauso es la única interrupción que se agradece".

Fiebre de corales y polifonía multidisciplinar sin fronteras. ¿Esto que demuestra? Pues que el arte es inherente al ser humano, más allá de vetos de estratégica supremacista. Cantar unidos y unidas es como meditar. El canto es herramienta propiciatoria para la desconexión, una experiencia que la propia mente utiliza para aliviar tribulaciones. Cada individuo ligado a un propósito artístico común descubre la pasión de lograr metas tangibles, bellas, comunicativas. La técnica musical ensambla en la dinámica grupal subyugando por igual a intérpretes y oyentes, eludiendo cualquier relación errónea o abusiva y, el divismo termina por diluirse.

Eric Hoffer, filósofo y escritor estadounidense, afirmaba: "Donde existe la capacidad técnica necesaria para mover montañas, no se precisa la fe que mueve montañas". Así es como la afición reunida en un estadio deportivo se enardece al escuchar el multitudinario coro de entusiastas que hace vibrar las gradas. En publicidad corear eslóganes multiplica el impacto, afianzando el recuerdo del mensaje comercial. Y si es en el cine, bandas sonoras de éxito han contado con apabullantes coros enaltecedores de escenas; "Elizabeth" dirigida por el productor cinematográfico indio Shekar Kapur, nominada a siete Oscar, en las secuencias más imponentes tiene coros que intensifican y contagian la vehemencia del relato, remozando la excitación de los momentos álgidos. "La Misión" del director Roland Joffé, utiliza coros en su banda sonora, compuesta por Ennio Morricone y, hasta en el guión, como utensilio de defensa ante la inquisitorial ambición eclesiástica, se incluye un estremecedor coro de catecúmenos indígenas. En "1492: La conquista del paraíso", el compositor griego Vangelis imprime estupor y magnificencia al momento en el que Colón pisa tierra mediante la inclusión de coros, y, posteriormente, cánticos corales de elevada tesitura solemnizan la ceremonia del reconocimiento real. El compositor estadounidense Henry Mancini en sus bandas sonoras utilizaba muchas canciones y "revalorizó de nuevo el coro mixto en la versión de sus canciones. Aunque en la película interviniera una cantante (como en "Meglio Stasera" de "La Pantera Rosa", que cantaba Fran Jeffries) en el disco cantaba indefectiblemente un coro alternante de voces masculinas y femeninas que conseguían crear un aire de qualité inevitable por encima del valor intrínseco de la melodía", ("Música y Cine", Manuel Valls Gorina, Joan Padrol). Otra de las obras maestras del séptimo arte: "El León en invierno" de mil novecientos sesenta y ocho, contó con el genio musical del compositor inglés John Barry, conocido por sus trabajos musicales para la serie James Bond y por sus "coros mágicos"; según el criterio de los autores antes citados es "una de sus obras maestras por su tema principal, el de Chinon y el de la llegada de Leonor de Aquitania por el rio concebido visualmente para permitir el lucimiento de los dos bloques corales". Más recientemente la famosa película francesa "Los chicos del coro", film musicalizado por el galo Bruno Coulais, homenajea a las escolanías o coros de voces blancas que subyugan hasta el éxtasis mediante las límpidas voces de niños cantores.

Pero la podredumbre no sabe de respeto a la belleza ni a la inocencia y así el diecinueve de julio de dos mil diecisiete "eldiario.es" difunde. "La investigación final sobre los abusos en el coro de Ratisbona. Más de 500 menores fueron víctimas. Según dice el abogado. Era más importante proteger la institución; ignoraron a las víctimas y protegieron a los responsables".

Diversidad e idiosincrasia coral conforman encuentros cosmopolitas como el celebrado en el Botánico de Valencia donde se contó con la participación del Coro femenino del ICAV (Colegio de Abogados de Valencia). Más recientemente, la grata sorpresa llegó en el Encuentro de Coros de Cámara Alfons Dastis, llevado a cabo en la sala de actos del MuVIM (Museo Valencià de la Il-lustració i de la Modernitat), donde participaron las voces mixtas del coro a cappella Studium Vocale que, de negro riguroso y complemento granate, interpretaron canciones populares españolas. La rompedora segunda parte corrió a cargo del coro concertante femenino holandés (Utrech): Wereldvrouwenkoor Bianca C, puro gracejo al cantar en español temas hispanoamericanos "En Holanda pocas personas hablan español", confesaba una de las integrantes de tal espectáculo de progresía y estilismo polícromo: botines, medias fucsia, moradas y amarillas, vestidos verdes, turquesa y rojos. Otra de las cantantes, esta vez integrante de Studium Vocale, confesaba que cantar en un coro es tan resolutivo como acudir a una consulta psicológica. Y así lo apunta "gospelbarcelona.com": "Es una actividad efectiva contra el estrés y la depresión porque cantar aumenta los niveles de cortisol y de oxitocina, hormonas que ayudan a reforzar la autoconfianza y el nivel de bienestar personal. Al cantar se generan endorfinas, hormonas que producen sensación de placer. Es una especie de gimnasia neuronal. Mejora la memoria y la concentración".

Se canta para revindicar, "Coro de hombres gays de Madrid"; para defender derechos humanos, existen corales solidarias y otras reconfortantes en tratamientos médicos o situaciones de shock, existen voces mixtas en pro de la igualdad ¿Qué mejor que los cánticos a dos tres o cuatro voces en establecimientos de reclusión?

El convenio de colaboración entre el Institut Valencià de Cultura de la Generalitat Valenciana y la Federació de Cors de la Comunitat Valenciana, para el ejercicio de dos mil dieciocho se fijó en treinta mil euros, para financiar los gastos derivados de las actividades aprobadas por la Asamblea General de la Federación; "encuentros, jornadas y festivales corales, el Día Valenciano del Canto Coral, la publicación electrónica de la revista "Cantem", el Encuentro de Coros o actividades como "Nadal al carrer" entre otras, (www.ceice.gva.es", 06/07/2018).

"Es imposible y estúpido intentar separar los sentidos de la inteligencia" escribía el dramaturgo, ensayista y poeta marsellés (Francia) Antonin Artaud.