El miércoles algunos consejeros de sanidad de Comunidades Autónomas (CCAA) gobernadas por el PP, abandonaron la reunión del Consejo Interterritorial de Salud (Cataluña, Euskadi y Navarra, ni siquiera viajaron) donde se pretendía discutir un Marco Estratégico de la Atención Primaria, argumentando que habían acudido al encuentro por «lealtad institucional» pero que se iban porque era electoralista. El documento non nato es una de tantas realidades virtuales que, sin hablar de financiación, habitan en el mundo de las CCAA. Decidir temas como si los pacientes por médico no deben superar los 1.500 depende de un lejano Consejo de Política Fiscal y Financiera. Con un Ministerio de Sanidad que no sabe, o no puede, coordinar a las CCAA, la cuestión es si prescindir de un organismo en forma de Ministerio o si aquello lo que no funciona es la actual organización en CCAA. En la transición nunca pensamos que albergaríamos un sistema autonómico cuyo funcionamiento diario diera lugar a acusaciones partidistas. Si ciertas o falsas, es anecdótico para el sistema.
El jueves conocimos el informe de la Airef (Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal) sobre los Presupuestos 2019 de las CCAA. El documento oficializa el calamitoso estado de las cuentas con las que finalizara su mandato el actual Consell. El hecho que se haya dado a conocer en la víspera del inicio de la campaña electoral a la Generalitat Valenciana (GV) caprichosamente adelantada por el president Puig, añade dificultad a la hora de analizarlo, pero no exime de intentarlo.
La situación que describe AiRef (nacida como exigencias de la UE al objeto de velar por la sostenibilidad de las finanzas públicas) no contiene ningún elemento que no haya sido comentado en esta columna. Ahora lo importante es quien dice que los Presupuestos 2019 de la GV son inciertos con independencia de lo injusto que cada uno pueda considerar el actual modelo de financiación.
También en este 2019, se ha presupuestado con demasiados embrollos incluidos en sus números. Puesto que la GV estaba obligada a presentar unos presupuestos que mostraran un déficit de -0,1% del PIB, algo incompatible cuando se había cerrado 2018 con uno trece veces mayor, y se iba a entrar en un año electoral la imaginación de los responsables de la Conselleria de Hacienda se desbordó: el gasto se iba a incrementar en un 10% y los ingresos en un 24%. Ejemplos de virtualidades culposas. Seguramente Ximo Puig tras las elecciones del día 28 seguirá al mando del Consell, incluso puede que sea lo mejor, vistas las alternativas que existen, pero en ningún caso podrá ignorar el análisis que la AiRef ha hecho de sus presupuestos. Los ingresos son inciertos, tanto por los 1.325 millones de euros adicionales (los ingresos virtuales que el Consell lleva años inventándose) a los estimados por el sistema de financiación, como por el crecimiento previsto en determinados ingresos tributarios u otras partidas, que dice subirán por encima del 20%, sin sustento creíble para la AiRef. Es decir, se trabaja sobre partidas ingresos que no van a llegar del modelo de financiación y sobre impuestos que no van a recaudarse.
En cuanto a los gastos, la evolución apreciada al cierre de 2018 y el impacto de las medidas adoptadas, hacen prever que un aumento del gasto valoradas en 233 millones no sean compatibles con un déficit del -0.1% del PIB prometido por el Consell. Un año más chirrían las decisiones tomadas en favor del antiguo Canal 9.
Quizás sea oportuno recordar la evolución del déficit (como objetivo previsto y real a fin de año) con independencia de quien estuviera al frente del Consell: 2014 (objetivo -1,0%; real -2,6 %) 2015 (objetivo - 0,7%, real -2,54 %) 2016 (objetivo -0,7%, real -1,55 %) 2017 (objetivo -0,6 %, real -0,82 %) y cuando parecía que la convergencia podía darse, en 2018 todo se rompe, ya que con un objetivo previsto del -0,3%, el Consell cerró el año con -1,29% del PIB. Lo alarmante ahora es que en el informe del jueves la conclusión es que la evolución esperada puede llevar a fin de año del actual 2019 a un déficit superior al alcanzado en 2018. Es decir que cuando deberíamos llegar a -0.1%, el pronóstico lo sitúa como mínimo en -1.3%. Es por ello que acaba recomendando algo parecido a que los «hombres de negro» del nuevo Ministerio de Hacienda (MINHAC) tomen el control de las cuentas del nuevo Consell. Literalmente el consejo/orden dice que:
1.- La GV adopte medidas que permitan la reducción del gasto y/o el aumento de ingresos y con ello recuperar la senda de convergencia hacia el objetivo de estabilidad y el cumplimiento de la regla de gasto. La AiRef hará un seguimiento de esta recomendación de acuerdo con el procedimiento establecido a tal fin.
2. El MINHAC realice un seguimiento estrecho de la implementación de estas medidas de cuyos resultados se informará a la AiRef antes de la elaboración del informe de julio sobre cumplimiento esperado del objetivo de estabilidad y regla de gasto 2019.
3. El MINHAC evalúe la situación de la GV y establezca una senda de objetivos alcanzable y realista en concordancia con su situación fiscal.
Ante ello el Conseller Soler, en una reacción que seguramente considerará poco menos que heroica y que otros valoramos como ejercicio de irresponsabilidad, ha señalado que las conclusiones de la AiRef «son una obviedad», ya que «la Comunitat Valenciana no puede cumplir el objetivo de déficit mientras sea la comunidad autónoma peor financiada de España». ¿Qué propone para cuando el MINHAC actúe? quizás sepa que Sánchez nunca intervendrá a Puig2.
En las CCAA se ha recurrido al principio de que la política prospera en los conflictos. Y, la mayoría de las veces, ese conflicto es entre identidades en competencia (gobierno central y Autonomía) en lugar de defender posiciones legitimas opuestas en temas como administrar el estado de bienestar. Aunque muchos políticos digan que pretenden practicar la política del diálogo y el consenso, es en el desacuerdo y el conflicto donde encuentran la visibilidad que persiguen; la rutina es conocida: diga algo bueno sobre sus oponentes y será ignorado. Lanza una diatriba vitriólica y serás noticia de primera plana. En esta mecánica y con todos los problemas que arrastramos, para que queremos tanto presupuesto virtual en las CCAA. Para eso mejor revisémoslas.
[2 A pesar que de no estar aprobado por el MINHAC el obligado Plan de Ajuste que supuestamente debe dar respuestas ante el exceso de déficit de 2018, el sábado el President Puig anunció que el Presidente Sanchez había dado orden (para que la GV pudiera hacer frente a 55.000 facturas pendientes) de activar 104 millones del FLA ordinario del Primer Trimestre y otros casi 600 correspondientes al anticipo de la liquidación del modelo de financiación que normalmente se reciben tras la activación del FLA Vencimientos (una deuda que cubre deuda) cifra esta última cuyo global para el primer trimestre es de 3.087 millones de Euros. El resto de CCAA adheridas al FLA son: Aragón, Castilla-La Mancha, Extremadura y Murcia.]
