Desde 1622, el santoral católico festeja a San Isidro Labrador el 15 de mayo. San Isidro es el santo patrón de los agricultores y de todos aquellos que se dedican a la actividad agraria. Las escuelas españolas de Ingeniería Agronómica lo celebran con una serie de actividades culturales que se desarrollan a lo largo de los días próximos a esa fecha.

En el programa de este año 2019, la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agronómica y del Medio Natural (ETSIAMN) de la Universitat Politècnica de València (UPV) ha programado cuatro actos en los cuales el vino y la cerveza han sido los protagonistas: sendas presentaciones de los vinos de la Denominación de Origen Utiel-Requena y Bodegas Arráez de la Font de la Figuera, el aperitivo del concierto musical celebrado en el Auditórium de Bellas Artes y la comida de Hermandad del personal de la Escuela.

La presencia del vino y la cerveza en estos festejos podría considerarse normal dado el papel social que en nuestra cultura desempeñan estas dos bebidas, y más en un centro de formación de técnicos y profesionales del sector agroalimentario, pero en este caso está aún más justificada dado que la ETSIAMN cuenta con una bodega piloto para su elaboración. Estas instalaciones son utilizadas por los alumnos y profesores del Master en Enología para realizar prácticas, y allí se elaboran el vino y la cerveza que se sirvieron en los dos últimos eventos mencionados.

La formación en Enología se viene ofertando en la UPV desde 2001, primero como Licenciatura y, en la actualidad, como Master Universitario oficial. En el programa vigente hasta este curso 2018/2019 se cursan 90 créditos durante los cuales los alumnos, además de la parte docente, hacen prácticas obligatorias en bodegas de cualquier lugar del mundo y un Trabajo Fin de Master profesional o de investigación. Este Master forma técnicos, especialistas, investigadores y profesionales en el sector vitivinícola, de gran peso económico, social y cultural en la Comunitat Valenciana.

Lo paradójico de este protagonismo del vino y la cerveza en la vida universitaria de la ETSIAMN es que el Máster en Enología podría desaparecer de la oferta de nuestra Universidad en un par de años debido a que el número de alumnos matriculados se sitúa ligeramente por debajo del umbral fijado por la UPV. Y es que el criterio seguido en materia de másteres oficiales consiste en suspender a aquellos cuyo número de alumnos matriculados no alcance un número mínimo. Con este criterio, para el próximo curso 2019/2020 ya van a dejar de ofertarse algunos másteres que no han alcanzado en los últimos cursos el citado tamaño de grupo.

Si esto ocurre, todo el capital humano, técnico y científico acumulado en torno al Máster de Enología puede quedar seriamente mermado. En el actual mapa universitario español, sin un máster oficial estable, es muy difícil que se puedan consolidar o crecer grupos académicos y de investigación especializados.

Si bien es comprensible y loable el celo de nuestros rectores universitarios para utilizar los siempre escasos recursos públicos de la forma más eficiente posible, creemos que es conveniente abrir un debate sobre los criterios para fijar la oferta oficial de postgrado. Entendemos que es necesario tener en cuenta, además del número de alumnos, el impacto social de estos estudios y las necesidades socio-económicas de su territorio, sin olvidar el aprovechamiento de las instalaciones existentes y el fortalecimiento de la capacidad científica y técnica de la UPV en este campo.

La Comunitat Valenciana tiene un merecido prestigio y reputación en el negocio vitivinícola nacional e internacional. Su presente es sólido, y su futuro prometedor, ya que desde hace un par de décadas el sector se encuentra inmerso en una profunda transformación que está contribuyendo a un aumento del valor de su producción. A nivel autonómico ocupa el cuarto lugar en España en cuanto a superficie, producción y exportaciones (en valor). Cuenta con tres Denominaciones de Origen Protegidas autonómicas, una Denominación de Origen Protegida pluriautonómica y una Indicación Geográfica Protegida. La fortaleza de un clúster agroindustrial descansa en gran medida en la existencia de centros de formación e investigación de referencia, y el Master de Enología desempeña esa función.

Sería triste que dentro de un par de años la ETSIAMN no pudiera celebrar la fiesta de San Isidro con el vino de casa. Aún estamos a tiempo de evitarlo trabajando en el seno de la comunidad universitaria con una visión más amplia del valor de los estudios de postgrado. No podemos resignarnos a que la bodega de la UPV se quede sin elaborar vino todo un año por un alumno.