Primer tema: “Dan por sentado que tú sólo sabes cantar, no sabes hacer nada más ni siquiera escuchar” (Ses, cantautora gallega licenciada en filología gallega y antropología social). Antonio Gala refiere en Granada de los nazaríes, la tradicional enseñanza musical de jóvenes nobles cordobesas que, al estilo de Roma, cantaban en las “fiestas íntimas”. Existe el supuesto ampliamente consensuado de que el canto precedió al lenguaje (sin distinción de género) y que “el canto de los pájaros se acerca a la verdadera música” según afirmaciones del musicólogo alemán Hugo Riemann en Estética musical.

Segundo tema: “Si está difícil en el escenario. Ni te cuento detrás”, (Carmen Zapata, presidenta de Mujeres en la Industria de la Música MIM, gerente de Associació de Sales de Concerts de Catalunya ASCC y portavoz de la Plataforma estatal por la música PLAM). Lola Flores sobre sus inicios artísticos declaraba: “Nos vestíamos entre los corrales de cerdos, entre las gallinas y las cabras. Y en las cuadras separábamos a las ovejas y los caballos y los burros y los mulos para que nos dejasen entrar”, palabras recogidas por el periodista y escritor madrileño Juan Ignacio García-Garzón en su obra biográfica sobre la Faraona. Actualmente la precariedad laboral subsiste, al igual que la indefensión jurídica ante acosos entre bambalinas y despachos.

Tercer tema: “Hay que preparar el camino profesional de nuestras hijas que son el futuro del cambio y las debemos apoyar”, (Carmen Pacheco, directora del departamento de Socios de SGAE con sede en el modernista palacio de Longoria, fichada por SESAC (Sociedad de Autores y Compositores de Escenarios Europeos), propiedad de Blackstone “conglomerado conocido en España por los fondos llamados buitre” según informa Jesús García Calero en ABC del tres de julio del año en curso; un banco de inversión estadounidense fundado por dos miembros de Lehman Brothers “símbolo de la crisis financiera mundial”, y cuyo responsable nacional es Claudio Boada Pallarés, “Los Boada, de “amigos” de Franco a “dueños” del inmobiliario español” titula la web de merca2 del veinticuatro de agosto del año pasado. Yoko Ono, viuda del músico y cantante John Lennon afirma: “La mujer es el negro del mundo”.

Cuarto tema: “El 77% de los conciertos no cuentan con la presencia de ni una sola mujer”, (Soco Collado Cantos, directora gerente de la Asociación de Representantes Técnicos de Espectáculo A.R.T.E.). ¿Cuantas compositoras son reconocidas o consiguen hacer carrera en la música cinematográfica, publicitaria, televisiva o de videojuegos, además de otras aplicaciones? En España, citar el caso aislado de Vainica Doble (Carmen Santonja y Gloria van Aersen), con cabeceras de series televisivas, sintonías de programas y películas como Al servicio de la mujer española de Jaime de Armiñan.

Estas y otras muchas frases, clasificadas personalmente como temas, estaban colgadas, de tres en tres en cipreses de los jardines del Real-Viveros, ambientando la charla coloquio: “Como reinventar el mundo de la música desde el punto de vista feminista”. Deprime corroborar que las mujeres músicas siguen olvidadas por la industria y proyectos musicales, patentizando el carácter hipermasculino, restrictivo y excluyente del sector que, además, en el caso de las músicas considera la imagen condición sine qua non para contratarlas, afianzando los cánones machistas que generan el que “Hay dos que cobran muchísimo dinero y las demás se comen los mocos”, comenta Annabel Nadal (Ana Peligro) gerente de Suport Produccions.

“El mundo de la música es muy poco transparente, un sistema de clientelismo”, continúa denunciando la también programadora y community manager (gestora de una marca en Internet) de la discoteca La Peligro, profesional cualificada que palpa la realidad del engranaje y declara que “No es que la gente no estudie, es que no trabajan de ello, ahí hay un muro” la histórica exclusión. Sin repercusión mediática cualquier artista se desmoraliza, y sin posibilidad de compartir su arte o habilidades, y comunicar, cualidad innata femenina, también. Pero, las mujeres músicas sabedoras de todo ello han decidido abandonar el infructuoso laberinto de las lamentaciones y “El siguiente paso no es quejarse, es avanzar en el relato”.

“Cuando leí el cartel me emocioné”, dijo una de las asistentes sobre el concierto de Miss Bolivia, Amparanoia, Tremenda Jauría, Ses, Tesa y Poder Bi-Menstrual Dj. con Miss Yuls y Catalina Isis en sesión. Ana, visiblemente irritada confesaba que “El reclamo de la prensa institucional ha sido ¡cero! He llamado y nos han dicho que no interesa y los únicos medios que nos han dado voz han sido Ràdio Klara y Ràdio Malva”, cuya representante, sentada sobre la hierba como el resto de público mixto, declaraba “Sólo programamos a mujeres. Después de ponerme las gafas feministas, si puedo los boicoteo (refiriéndose a grupos sin participación femenina)”. Roles absurdos y denigrantes continúan siendo imbuidos y publicitados encasillando la música en parámetros sexistas. Penélope, joven y batalladora música, vestida con minifalda y blusa negras, arremetió contra la pasividad, “Vivimos muy cómodas y estamos en un momento que no debemos acomodarnos; creo que nos falta organización, hay que inventarse otras lógicas”.

Carlos, profesor de flauta, relataba como cuando tiempo atrás al formar su conjunto musical un compañero le advirtió “No metas a ninguna chica porque te va a crear problemas”, admitiendo a las claras la “Supremacía por roles machistas” en un sector donde hasta hace treinta años ninguna mujer formaba parte de las numerosas bandas de música tradicionales existentes en la Comunidad Valenciana. “No hay una tradición en la educación, debemos formarnos, aprender”; como docente corrobora que ciertos instrumentos como la trompeta apenas tienen alumnado femenino, algo que no entiende, aunque esto se fundamenta en la errónea conceptuación de que “Las mujeres no valían”, contrariamente a lo que ocurre con instrumentos de madera y cuerda.

La mayor barrera en la música no es la social, sino la empresarial, “El público es muy responsable de lo que se consume, de lo que se programa”, dictaminó Ana Peligro animando al boicot. “Hay que tomar una posición política, no se trata de construir espacios no mixtos. Los cambios nos los va a imponer el Gobierno”, declaraba Penélope lapidariamente. Al programar en función de la venta segura de entradas se genera un bucle donde prima la popularidad, algo inexistente sin inversión en impactos mediáticos continuados y campañas publicitarias bien estructuradas. Siendo imposible vivir de la música esta pasa a ser un hobby. “Al final la mujer ha de tener otro trabajo”, dijo Henar, actualmente en el mundo del cine y con anterioridad trabajando en producción musical.

Curiosamente la totalidad de bandas de mujeres deben cumplir requisitos de calidad que a las integradas por hombres se les presupone, en la Gran Fira de València, Fira de Juliol, como finalistas, de entre veintitrés grupos femeninos, quedaron Maluks, Amazonians, Kuzu, Bandoleras y Loretta´s. En lo referente a mujeres Dj, Anabel Lee reconoció el auge de mujeres a la hora de pinchar y mezclar; “Tenía la hincha de hacer una sesión de mujeres” y nació Poder Bi-Menstrual.

De igual modo “Es inalcanzable la compatibilidad” entre maternidad y música tal compo sucede en otros muchos sectores laborales. “Una vez fui madre, fui yo la que me quedé encerrada en casa. Mirad, yo soy persona y también quiero salir a conciertos” narraba Amparo, una música, pareja de músico. Arpi, La Heidi Balika, directora de Tiakatú, primera batucada feminista de Valencia, confesó su asombro al comprobar que la sociedad consideraba que “Era como muy punki una tía tocando la guitarra; ¿cómo podemos salir de ahí? Querer es poder”. Y qué decir del “Submundo que hay detrás de la música”.

La música, según la interpretación de los sueños, significa consuelo; el neurólogo austríaco Sigmund Freud, recabando opiniones antiguas y coetáneas, coincidió en que “el hombre (mujer) sueña con aquello de lo que se ocupa durante el día. Este interés que da a su vida despierta, pasa al estado de reposo”.

Quinto tema: “Somos capaces de currar juntas. Farem ballar la revolució”, (Ana Peligro).