Una encuesta de YouGov, firma internacional de investigación de mercados y análisis de datos basada en Internet, destaca que el 12% los varones británicos cree que ganaría al tenis a Serena Williams, quien atesora 23 títulos individuales de torneos Grand Slam y 4 oros olímpicos y durante 300 semanas fue la mejor jugadora mundial.
Podemos deducir tres cosas: uno de cada 8 varones británicos juega muy bien al tenis. Uno de cada 8 varones británicos tiene un alto concepto de su capacidad como tenista. Uno de cada 8 varones británicos es idiota. La tercera propuesta es la que tiene más posibilidades. Un sociólogo sabría si Gran Bretaña sale bien comparada por tener 1 varón idiota de cada 8.
Del dato se infiere que la causa es el machismo, pero no aclara qué son el 3% de las británicas entrevistadas que aseguran que ganarían a Serena. Como estadísticamente no cabe que sean grandes tenistas podemos decir que son machistas, pero es más seguro que serán idiotas, sin que una cosa contradiga a la otra. Otro elemento que puede corromper la conclusión para hombres y mujeres es que Serena es negra y no hay que desdeñar el racismo, que puede no interferir en el machismo, pero es compatible con el idiota.
El resultado ha sido puesto en relación con un gran slam que nunca se ha jugado, el que enfrente a tenistas con tenistas (varones con mujeres) y McEnroe ha dicho que si Serena jugara con hombres iría la 700 en el ranking. No hay manera de probarlo, pero aceptémoslo como hipótesis. Eso diría que 700 varones tenistas jugarían mejor que Serena, pero de ella para abajo hay 7.500 millones de personas que juegan peor (3,787 millones de varones y 3.712 millones de mujeres) con idiotas británicos y del mundo incluidos.
