Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

En voz alta

Casado y Arrimadas se apuntan a Supervivientes

A diferencia de lo que suele ocurrir, los resultados de las últimas elecciones generales no dejaron contentos prácticamente a nadie. PSOE y Podemos,pero también los independentistas, se dieron cuenta que debían optar por el mal menor de tragarse todo lo que se habían dicho entre ellos y antes de volver a las urnas optaron por pactar un gobierno que, por si alguien lo dudaba y como se ha demostrado esta última semana, tendrá que sortear notables diferencias casi a diario.

Sin embargo, para PP y Ciudadanos el recuento de votos y posterior reparto de escaños les dejó no solo en la oposición sino con una situación especialmente compleja para sus líderes. La debacle de los naranjas forzó la retirada de Albert Rivera y la salida al rescate de Inés Arrimadas mientras los 88 diputados populares dejaban a Pablo Casado muy lejos de su consolidación. Así las cosas, los dirigentes de ambas formaciones han optado por abrazarse para intentar ayudarse e impedir hundirse, un instinto de supervivencia que metafóricamente les ha llevado a apuntarse al reality de moda en Tele 5.

Como se ha evidenciado estas últimas semanas, la decisión adoptada por las cúpulas para intentar concurrir juntos a las elecciones vascas y gallegas del próximo 5 de abril ha sido muy contestada hasta el punto que supuso el abandono del líder de los populares vascos Alfonso Alonso o la negativa rotunda de cualquier acuerdo por parte del todopoderoso Alberto Núñez Feijóo al que nadie le tose en su partido algo que, por cierto, empieza a pasar también con el presidente andaluz Juan Manuel Moreno Bonilla. En Ciudadanos el pánico extendido es de tal calado que han preferido el prietas las filas entorno a Arrimadas para intentar frenar la caída libre.

Para mi sorpresa, del acercamiento táctico entre PP y Ciudadanos se han empezado a extrapolar conclusiones de futuro para la política valenciana con las que no coincido en absoluto básicamente porque, además de faltar más de 3 años para las próximas elecciones autonómicas y municipales en nuestra Comunitat con todos los acontecimientos y cambios que están por venir aquí y a nivel nacional, los resultados de las elecciones vascas, gallegas y catalanas condicionarán mucho las estrategias de los partidos y la consolidación de sus dirigentes.

Isabel Bonig y Toni Cantó no acaban de tener controladas sus organizaciones ni mucho menos y además pelean por ganarse el favor de sus respectivos líderes nacionales. Aunque les una su tarea de oposición al Botànic, es lógico que intenten disputarse el voto del centro derecha. Es cierto que ahora Ciudadanos parece muy deshinchado pero el dato objetivo es que se quedó a un solo escaño de los populares en las autonómicas de hace solo un año y que la vida en general y la política en particular da muchas vueltas. Así que como diría Simeone será mejor el análisis partido a partido sin precipitar pronósticos.

Por cierto, me cuenta una amiga que el Conseller de Hacienda, Vicent Soler, quedó encantado con la intervención la pasada semana del presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, en Forinvest totalmente alineada con la protección del medioambiente y los Objetivos de Desarrollo Sostenible junto al concepto de empresa que haga compatible los derechos de sus accionistas, trabajadores y compromiso con la sociedad.

Compartir el artículo

stats