Cuando Amancio Ortega, el dueño de Inditex, comenzó a hacer donaciones a la sanidad pública recibió innumerables críticas por parte de los representantes de Podemos, entre ellos Pablo Iglesias que se mostró el más crítico.
Gracias a esas donaciones muchos hospitales pudieron tener aparatos oncológicos para la detección del cáncer como son los mamógrafos. Al hospital de Ontinyent llegó uno de esos aparatos, gracias al cual se pueden salvar muchas vidas porque permite un diagnóstico precoz de la enfermedad.
En una situación de emergencia nacional como la que estamos viviendo, Amancio Ortega ha vuelto a dar muestras de su generosidad altruista donando dinero a la sanidad pública, poniendo a disposición del Gobierno, que todavía no se lo ha agradecido, sí lo ha hecho el rey Felipe VI, la red logística de Inditex para traer material sanitario de China como mascarillas, equipos de protección y respiradores.
El profesor Monedero recriminó en un tuit que Inditex hubiera anunciado un ERTE después de los beneficios que había obtenido. Desde Inditex le recordaron, con mucha educación, que el grupo textil no se plantea de momento ningún expediente temporal de empleo y que mantiene a toda su plantilla en nómina.
A mí me gustaría que en este país hubiera más empresarios como Amancio Ortega y menos políticos demagogos como Juan Carlos Monedero.
Desde las redes sociales se ha iniciado una campaña de recogida de firmas para que el próximo premio Príncipe de Asturias se le conceda a Amancio Ortega. Me sumo a esa petición.
