Los árboles no solo son una parte fundamental para el bienestar del planeta, si no excepcionales testigos de cómo era el mundo que habitamos hace miles de años. Hace más de 50 años, enla Universidad de Arizona, un grupo de científicos comenzó a interesarse por la longevidad de los árboles, dando lugar a resultados sorprendentes. Gracias al estudio de los anillos y las características de la madera del tronco, a día de hoy, se puede saber con gran exactitud no solo la edad aproximada de un árbol, si no también averiguar las características del clima en otras épocas de la historia. Actualmente, el ejemplar más antiguo del mundo, se encuentra en California. Conocido como "Matusalén" es un pino longevo con una edad aproximada de 4850 años. Su ubicación es secreta con el objetivo de preservarlo y protegerlo. En España, aunque ninguno de los árboles más longevos se aproxima a una cifra tan grande, tenemos varios ejemplos que son realmente significativos. Desde Tenerife, con su Drago milenario de casi 1000 años a la Sierra de Guadarrama con su Tejo de Barondillo, con casi 2000, nos sirven para apreciar que poseemos un gran patrimonio natural en este sentido. Estos fundamentales compañeros de vida nos acompañan se forma silenciosa, permitiéndonos disfrutar de su belleza y contribuyendo, con su liberación de oxígeno a la atmósfera, que nuestro planeta continúe siendo tal y como es. Continuemos preservándolos, cuidándolos y protegiéndolos.