L’Ovidi no és soles l’Ovidi, perquè l’Ovidi és Alcoi», dijo Antoni Francés, alcalde alcoyano, en la inauguración de la exposición ‘Vinticinc vacances’, en la que 25 artistas expusieron su obra, inspirada en Ovidi, y con su mirada, realizada por Toni Miró, observándonos silente desde la entrada.

El recuerdo de Ovidi volvería al Teatro Calderón de Alcoi, con motivo de la entrega de los premios de la música en valenciano que llevan su nombre, y ahora lo hace al Principal de València, en los actos organizados por el Col·lectiu Ovidi Montllor con el Institut Valencià de Cultura, en dos conciertos del repertorio de Ovidi, interpretado por 14 músicos valencianos, tres cortometrajes realizados para la ocasión y diversos textos poéticos de su predilección, dentro de los actos de ‘L’any Ovidi’, que finalizará en Alcoi.

Al repasar los textos más reveladores de Ovidi, en el 25 aniversario de su muerte, su ‘Autoretrat’, muestra su propia caricatura, como «cantant, artista i pallasso», que abarca múltiples registros. Ovidi sufrió muchas dificultades en los últimos años de su carrera, y concentró su actividad artística en el cine, en el que dio rienda suelta a su expresiva capacidad dramática, de la cual también hace gala en sus canciones.

En 1972 grabó ‘Un entre tants’, dedicado a sus padres, y, dentro del vinilo, incluyó una de sus piezas más populares, ‘La fera ferotge’, acompañado, entre otros, por Francesc Pi de la Serra. En 1974 homenajeó a su pueblo grabando ‘A Alcoi’, dentro del cual registró ‘Els amants’ -«no hi havia a València dos amants com nosaltres»- de Vicent Andrés Estellés. También, ‘Corrandes de l’exili’, de Pere Quart: «No em moriré d’enyorança, ans d’enyorança viuré». Y ‘Assaig de càntic en el temple’, de Salvador Espriu -«em quedaré aquí fins a la mort»- dando un testimonio de vida y de compromiso histórico con el país.

En 1976, con portada de Guinovart y palabras de Joan Fuster, grabó ‘Salvat-Papasseit, per Ovidi Montllor’. Dentro de él se encuentra ‘Si jo fos pescador’: «Si jo fos pescador pescaria l’aurora, si jo fos caçador atraparia el sol». Qué hermoso. Un año más tarde, en ‘De manars i garrotades’ incluyó el fragmento de ‘Sageta de foc’, también de Papasseit -«hi ha un home a la pressó, dels que avançaven. Junteu-vos. Traieu-li l’embaraç»- una bella apología de la solidaridad.

Pero Ovidi, sarcástico, irónico siempre, nos guardaba su despedida final. «Tot ben senzill i ben alegre. Em creureu mort. Jo no hauré mort. Faré vacances». «Porteu-me a Alcoi que és el meu poble, i allà on comença el Barranc del Cinc, prop d’un romer, al seu costat deixeu-me ja. Però llavors, no em moriré. Faré vacances». Gràcies Ovidi, vinticinc anys de vacances, no t’oblidem. Que el aroma del romero, junto al barranco, por siempre te acompañe. Como a nosotros tu recuerdo.