“Bancarización, educar para el sistema capitalista. De aquí a diez años la escuela no tendrá nada que ver con lo que hay ahora, la robótica va tan deprisa”. Francisco Delgado Ruiz, exdiputado y exsenador en las Cortes Generales por Albacete presentó su quinto libro, “el cincuenta por ciento son citas”, dedicado al pedagogo español, exiliado en Cuba, Herminio Almendros, en el Colegio Mayor Rector Peset. “Se puede hacer una buena educación al margen de las leyes” apuntaría en el postrer debate.

“A veces el tener tanta información no es tan bueno” comentó haciendo referencia  al jaleo que se montó en época del ex ministro de Educación Ángel Gabilondo, periodo dos mil nueve dos mil once. “Gabilondo contó los entresijos del por qué no se llegó al pacto escolar. ¿Qué vas pactar si el control de la educación lo tiene quien lo tiene? Un pacto es partir de cero”. Añade Delgado que “UGT (Unión General de Trabajadores) no quiere ni hablar de escuela pública y laica, la CEAPA (Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnado) se ha echado en brazos del PSOE. Hay muchos intereses por medio”.

¿Por qué cayó Maravall (ex ministro socialista de Educación y Ciencia con Felipe González)? Secretos de Estado”.

¿A nadie le corroe por dentro ver como las futuras generaciones seguirán siendo carne de cañón para intríngulis políticos, religiosos y financieros del sistema educativo?

“Una educación crítica que no tenga dogmas sigue siendo un reto, la educación para nosotros es una herramienta, el laicismo moderniza la escuela” asevera Raquel Ortiz, coordinadora de Valencia Laica, al inaugurar la charla sobre la obra: De la instrucción pública a la digitalización de la enseñanza. España (1820-2020), título del trabajo del también expresidente de Europa Laica.

¿Hacia dónde se quiere conducir al alumnado?  ¿Cuándo acabará la manipulación educativa como herramienta para el juego de ventajas y desventajas? ¿Cuántas personas de origen proletario pueden acceder a estudios y oposiciones de rango que refresquen estamentos de poder? ¿Cuántas personas racializadas sobreviven a estereotipos educativos?

Teniendo en cuenta que el sesenta por ciento  de libros utilizados en el sistema educativo español “los escribían personas que trabajan para editoriales católicas”, apunta Delgado, la iglesia católica mantiene su intocable gestión pactada con el organigrama estatal, tanto con la utópica izquierda ¡reinante! como con la derecha ¡multisucursal! Una teocracia educativa que estipula “que nunca se enseñe nada en contra de la doctrina”. “España ha sido un Estado confesional casi siempre” añade el profesor jubilado de Filosofía Rafael Cuesta en el evento organizado por Valencia Laica. “Seguimos pagando veinte mil catequistas, la aconfesionalidad solo es retórica”. Christa Meves, psicoterapeuta alemana, escribiría en Los cuentos en la educación de los niños: “Nosotros, los seres humanos, hemos comenzado a pensar y se nos enseña a hacerlo de una manera planificada (y eso comienza ya entre los que se debaten con el ABC)”.

¿Existirá algún notorio sesgo diferenciador de adoctrinamiento cuando empresas digitales plasmen sus ideologías, o las de sus cabecillas y prevalezcan estrategias comerciales? ¿La enseñanza en manos de multinacionales? “Lo único que vale es el negocio” afirma en su intervención Cuesta.

“Han pasado veinticinco años y no se ha inaugurado ninguna universidad pública”, este nicho ha sido copado absolutamente por la privada y la privada religiosa lo cual deja en manos indiscutiblemente ortodoxas y de negocio puro y duro el futuro formativo. “A corto plazo España va a seguir con un sistema dual, público privado. La nueva ley de Formación Profesional ayuda a la privatización. La Universidad Católica de Murcia se ha lanzado como una loca” a ofertar opciones “superatractivas”.

Bruno Ciari, pedagogo italiano militante antifascista, ligado al Movimiento de Cooperación Educativa, en: Modos de enseñar, libro publicado hace ¡casi medio siglo! ya manifestaba que: “La educación moderna está en crisis, porque no es humana; separa al pensador del conocimiento; al maestro de la materia, al alumno de la escuela; en fin, separa al sujeto del objeto. Ha generado jóvenes lógicos, que saben lidiar con números y máquinas, pero no con dificultades, conflictos, contradicciones y desafíos”.

¿Realmente es una ensoñación la democratización del sistema educativo?

¿Por qué aumenta el absentismo participativo de padres y madres en las escuelas? ¿Tal vez porque “padres y madres han sido expulsados de la gestión”? “En esas estamos en España”. 

¿Por qué la política ha maltratado y maltrata a la enseñanza? “Para ellos es un negocio, es como si la educación le importase poco a la política, es un tejer y destejer constante”. El autor, durante su periplo político, palpó la cruda realidad barajando datos inaccesibles para quienes no se han aposentado en cualquier puesto político. “Pasaron por nuestras manos todas las reformas durante el gobierno de González (LODE-Ley Orgánica reguladora del Derecho a la Educación), LOGSE-Ley Orgánica General del Sistema Educativo, LRU-Ley Reforma Universitaria)”. En España “la ley que dura más tiempo” es la Ley Moyano especifica el escritor, duraría hasta mil novecientos setenta desde el mil ochocientos cincuenta y siete, ¡ciento trece años!

¿Mujeres en cargos políticos relevantes del sistema educativo? “La primera ministra, curiosamente, ha sido Esperanza Aguirre”, nombrada por Aznar (PP). Félix Arija, maestro burgalés jubilado, declaraba en dos mil diecinueve en CTXT Contexto y Acción: “Esperanza Aguirre ha sido la peor ministra de Educación, incluyendo el franquismo”.

¿Sistema educativo otro comodín para llenar arcas clientelares y lacayas?

“Lo que es absolutamente vergonzoso es que cuatro decidan todo: controlen el dinero, la actividad pedagógica, impongan la disciplina, etc”, se lee en el Libro rojo del cole.

Cuesta, integrante de Valencia Laica, apuntaría que: “Muchos ministros, muchas leyes, pero nunca, nunca una financiación adecuada, el sistema educativo es lento, estático incluso a veces represivo, hay una especie de constantes históricas: la permanente inestabilidad política que conlleva inestabilidad educativa”, en España se “da un paso adelante y dos o tres hacia atrás”.

¿Segregación por clases sociales? “Lo que quizá sea más preocupante”. ¿Segregación por lugar de residencia? “Las niñas y niños que viven en el Hierro tienen el mismo derecho que los de Bilbao, en Euskal Herría se gasta el doble que en Canarias y eso no es justo”. ¿Segregación pos sexo? ¿Segregación por brecha digital? ¿Segregación por conciliación familiar? ¡Segregación! ¡segregación! En un país donde se ha alcanzado el mayor nivel de empobrecimiento de las familias con esta última crisis, triplicando al antepenúltimo país europeo del listado, ¿la educación será nuevamente una exclusiva ostentación social para generaciones enchufadas, de estirpe y capitalistas de pro? La precariedad como criba universitaria. ¿Qué familia española puede soportar tener a jóvenes sin ganar dinero durante años en carreras como Medicina donde se ha llegado a una extrema escasez de especialistas en la bolsa de trabajo.

“La educación en España ha sido un oficio de alto riesgo”. ¿Cuántos maestros y maestras murieron asesinados, cuántas familias y amistades de docentes represaliadas, cuántos de sus bienes robados por el franquismo?

¿Existe inquietud indagadora por parte de alumnado y familiares en conocer entresijos y planes velados en proyectos y leyes educativas? ¿Quién vela por la educación pública? ¿Por qué muchos ayuntamientos han privatizado los establecimientos dedicados a niños y niñas de cero a tres años?

En un texto escrito por Arnold Gesell, director de la Clínica de Desarrollo Infantil de Yale, recomendado tanto a madres y padres, pediatras y profesionales de la educación, docencia y psicología se recoge la siguiente experiencia: “Una vez se le oyó de decir a un niño inteligente de cuatro años, mientras construía una casita de juguete: “Las casas no tienen cola”. Este lúcido juicio era la serena conclusión de una mente inquisitiva”.