Opinión | Bolos
La reputación de un periódico

Imagen del Cecopi el 29 de octubre, aportada a la jueza de la dana por Salomé Pradas. / EP
El 29 de octubre de 2024 quedará en la memoria de la sociedad valenciana, pero para siempre en la de los familiares de las 228 víctimas y en los miles de damnificados que perdieron todo o parte de su biografía. Solo por el respeto que merecen, sería necesario poner un poco de cordura a esa disparatada batalla de relatos. Levante-EMV publicó ayer que el «Cecopi se convocó cuando ya habían muerto 15 personas», una información sustentada en una investigación a partir de los autos de la instrucción de la jueza de Catarroja, de las mediciones y los correos enviados por la Confederación Hidrográfica del Júcar, y de la Agencia Estatal Meteorología, así como de las llamadas recibidas en el teléfono de Emergencias 112. También de datos propios, ya publicados por este diario, y en otros muchos medios. Todo ello concluía que la convocatoria del Cecopi se inició cuando ya habían desaparecido 15 personas, seis en Utiel y la mayor parte en la Ribera, lo que anticipaba la posterior tragedia. Esos quince hombres y mujeres, que desagraciadamente, murieron. El titular estaba equivocado, en una palabra, porque dónde decía «muertos», teníamos que haber puesto «desaparecidos». Por ese error, que asumimos en nombre de toda la redacción, despublicamos la información en nuestra plataforma web, y sobre las seis de la tarde volvió a estar en nuestra versión digital con toda la explicación pertinente. Esa inexactitud fue aprovechada para cuestionar nuestro trabajo periodístico en general y nuestra cobertura sobre la gran riada, en particular. La libertad de expresión vale para todos, también para los que nos critican. Están en su derecho, incluso de tener el mal gusto de faltarse a nivel personal -un atrevimiento al que nunca nos prestaremos-, pero los que somos amigos de la verdad reconocemos nuestras equivocaciones, faltaría. Como seres humanos, todos cometemos errores, aunque el gran sabio Mahatma Gandhi dijo que siempre son perdonables, si uno tiene el coraje de admitirlos. Estos son los hechos, pero por si acaso, que quede claro que la reputación de este periódico tiene más de 150 años de servicio diario a nuestros lectores.
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