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Opinión

La invisibilidad también es una forma de desigualdad

Jurado de los Premios EVAP 2025

Jurado de los Premios EVAP 2025 / Levante-EMV

¿Has oído hablar de los Premios EVAP? A simple vista, pueden parecer una gala más de reconocimientos, pero no lo son. Son mucho más que eso. Son una demostración de que las empresarias, directivas y profesionales existen, brillan y transforman nuestra sociedad.

Uno de los objetivos de Asociación de Empresarias, Directivas y Profesionales de Valencia (EVAP) e general y de los premios, en particular es dar visibilidad a esas mujeres la sociedad muchas veces no ve porque no miramos lo suficiente. Y la invisibilidad, en sí misma, también es una forma de desigualdad.

En la XVIII edición de los Premios EVAP, celebrada en el Roig Arena, hemos tenido el honor de reconocer a cinco mujeres que, juntas, forman una auténtica constelación que nos guía hacia la igualdad: Bisila Bokoko, Lucía Mayordomo, Laura Urquizu, Yaiza Canosa y Concha Baeza. Cada una de ellas representa un valor esencial para construir una sociedad más justa.

Bisila Bokoko nos recuerda que la diversidad es un valor que nos complementa y nos une; Lucía Mayordomo encarna la integridad y el compromiso incluso en los momentos más críticos, como durante la DANA; Laura Urquizu demuestra a través de su profesionalidad que las mujeres pueden cambiar el mundo desde la empresa; Yaiza Canosa muestra que la juventud sí tiene visión y capacidad para transformar; y Concha Baeza simboliza la fuerza colectiva de las mujeres de EVAP, que actúan cada día para visibilizar y empoderar a otras.

Porque cuando visibilizamos a mujeres referentes, enviamos un mensaje claro a las nuevas generaciones: que ellas también pueden llegar, que su talento también importa, que no hay profesiones ni liderazgos marcados por el género. Y, además, demostramos con hechos que la supuesta escasez de mujeres destacadas no existe.

El problema nunca ha sido la falta de talento, sino la falta de visibilidad. En EVAP lo sabemos bien. Somos ya casi 500 asociadas, con más de 80 incorporaciones este año y 16 empresas comprometidas con la igualdad, y trabajamos cada día para que las mujeres estén presentes en los espacios de decisión, para que su liderazgo sea reconocido y para que su ejemplo inspire a otras.

Según nuestro último informe ‘Situación de las empresarias y directivas en la Comunitat Valenciana’, del total de mujeres con responsabilidad en la Comunitat Valenciana, ya sea como empresaria por cuenta propia o con puesto de dirección por cuenta ajena, el 84,3 % corresponde a empresarias y un 15,7 % a directivas y gerentes.

Estos datos hablan por sí solos: las mujeres lideran, pero lo hacen fuera de las estructuras tradicionales. Cuando no se les abren las puertas, las crean. Emprenden, fundan, innovan. Pero aún no ocupan, en la misma proporción, los espacios de decisión dentro de las empresas, las instituciones o los consejos de administración.

Llegados a este punto, surge una pregunta: ¿por qué seguimos necesitando justificar la presencia de mujeres en estos espacios? La respuesta no está en su falta de preparación ni de ambición, sino en un sistema que aún no reconoce el liderazgo de las mujeres, una educación que perpetúa estereotipos y una falta de referentes visibles.

Por eso, desde EVAP seguimos apostando pordar visibilidad a quienes abren camino. Porque cuando una mujer es reconocida, no solo recibe un galardón: recibe una voz, un espacio y una historia que inspira. Y, sobre todo, abre el camino para que otras puedan recorrerlo.

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