El municipio valenciano de Llocnou de Sant Jeroni se localiza en el sector suroccidental de la comarca de la Safor, en el límite con la Vall d’Albaida. Se extiende por 6,47 km2 y limita al Norte con Almiserà; al Este con Castellonet de la Conquesta; al Sur con Vilallonga; y al Oeste con Terrateig. El núcleo urbano se halla a 98 m.s.n.m., en el sector nororiental del término, junto a la margen derecha del río Vernissa, en la divisoria con el término de Almiserà. Llocnou de Sant Jeroni forma parte de un corredor fluvial situado entre montañas, formado por el valle del río Vernissa que históricamente ha actuado como eje vertebrador del territorio. El principal acceso a la localidad lo constituye la autovía CV-60, que comunica Gandía con la Vall d’Albaida.
En el sur se ubican las principales elevaciones, mientras que, por el norte, discurre el río Vernissa. El sector meridional está ocupado por la sierra de Ador, donde predominan los espacios forestales, sin tierras en cultivo. Esta sierra, perteneciente al sistema prebético, cierra por el mediodía la hoya del Vernissa. Está formada por materiales cretácicos calizos, aunque con alguna intrusión de las arcillas del Keuper. Las principales elevaciones del término son La Cuta (684 m), La Carena (653 m), Penya dels Forcalls (601 m), El Carrascó (581 m), La Lloma de Sant Jaume (574 m) y el Tossal del Morquí (456 m). Se aprecia un extenso piedemonte entre la sierra y el río Vernissa, allí donde se asienta el núcleo urbano, junto a uno de sus meandros. El suelo está dominado por margas blanquecinas de la facies ‘tap’, denominadas localmente como pedra llacorella, depositadas en el fondo de los valles en la era terciaria, caracterizadas por su riqueza en nutrientes, lo que posibilita el aprovechamiento agrícola. El clima es mediterráneo templado, con una temperatura media anual de 16°C. Las precipitaciones son muy irregulares, con una media de 650 mm en el llano y unos 750 mm en la Cuta.
Apuntes históricos de Llocnou
Este territorio tiene vestigios de ocupación humana desde época ibérica. En el Tossal del Morquí, situado entre Terrateig y Llocnou de Sant Jeroni, se ubicaba un poblado ibero de importancia estratégica, puesto que controlaba el puerto de Lletó. Entre los siglos I y II d.C. existió la villa romana de la Sort y la Vinya de la Guapa. Desde el siglo XI estuvo habitada por la alquería morisca de Rafalet de Bonamira, denominada en origen Rafal de Ben Amira, que era propiedad de este oligarca perteneciente a la taifa de Dénia. El término Cuta, que corresponde con el pico más elevado del actual municipio, designa en árabe la raya hasta donde podían llegar los pastores del valle de Vilallonga o de Castellonet de la Conquesta, ya que a partir de ahí esas tierras pertenecían a Ben Amira.
Tras la conquista de Jaume I estuvo en manos de Ximèn Pérez de Arenós, quien lo vendió a Arnau Sarina y de ahí pasó al duque de Gandía, quien lo donó a los monjes del monasterio de Sant Jeroni de Cotalba en 1424. En 1505 el Rafalet de Bonamira quedó despoblado por orden del prior de Cotalba. Durante el siglo XVI los religiosos lo transformaron en una granja trabajada por jornaleros. Dicha iniciativa fracasó y se fundó posteriormente el “Lloc Nou”, por lo que las nuevas casas se ubicaron junto al río Vernissa. Se fundó en 1609 y para ello realizaron una Carta Puebla, donde denominaron a la nueva población Lloc Nou de Bonamira. Se instalaron 15 familias de cristianos viejos, que era el número mínimo para establecer un señorío, procedentes de Alfauir y Castellonet. Con la disolución de los señoríos territoriales en 1837, se realizó el amojonamiento del término.
Población y economía
El municipio de Lloc Nou de Sant Jeroni nunca ha alcanzado los 1.000 habitantes. En el año 1877 había 264 habitantes. El auge de la viticultura permitió que aumentase hasta 538 en el año 1900. En 1960 alcanzó los 752. El reclamo de las ciudades de la Safor, especialmente Gandía, atrajo parte de la población, de manera que se redujo en los años 80 a los 500 vecinos. Desde entonces la población oscila entre los 500 y los 600 habitantes. En 2019 hay censados 546 habitantes. Su densidad poblacional es de 84,35 hab/km2.
La economía ha sido tradicionalmente agrícola, aunque en los últimos años se han establecido algunas industrias. La superficie cultivada alcanza las 154 hectáreas, de las cuales 133 pertenecen a cultivos de regadío y únicamente 21 son de secano. El regadío está protagonizado por los cítricos, con alrededor de 130 hectáreas. Los cultivos de secano son olivos (unas 20 Ha) y almendros. En las áreas de piedemonte el terreno está abancalado para su cultivo, como lo indicaba el botánico Cavanilles en su obra «Observaciones sobre la historia natural, geografía, agricultura, población y frutos del Reyno de Valencia» (1797) «… y el de las paredes secas que levantan para contener la tierra de sus campos, dispuestos en graderías por lo desigual del terreno».
Los terrenos de regadío se abastecen del río Vernissa, de pequeños manantiales y de varios pozos, en su mayoría modernos. La Séquia Mare de Llocnou se inicia en el Assut de Llocnou y deriva por la margen derecha del río Vernissa. El azud, de 30 m de longitud y 1,5 m de anchura, permite el riego de las partidas de la Planissa, el Corral del Ramat, l’Horta de Dalt, l’Horta de l’Hostal, El Pouet de la Riba y Les Tornetes, en el término de Llocnou y la del Pont del Pinar en Almiserà. En su trazado se halla un acueducto para salvar el Barranc de Juncar o del Cossi. En el interior del casco urbano, se localiza el Llavador Municipal, restaurado.
El paisaje urbano y rural de Llocnou
El núcleo de población creado en 1609 se situó a ambos lados del Camino Real, actual carrer Major, y posee una morfología típica de pueblo-calle. Ignasi Mora en su obra Josep Camarena i l’ocàs del món rural (Viatge a la Safor) (1988) señala que «En realitat Llocnou és el típic poble que ha crescut al llarg d’una via de comunicación, el camí ral, que en l’actualitat és la carretera de Gandia a Albaida». Posteriormente se amplió hacia el sur con otra calle paralela, carrer Ausias March. La original iglesia parroquial de Sant Roc se edificó a finales del siglo XVII, junto a la carretera. Era un edificio austero y de fábrica modesta, de estilo barroco y planta rectangular, que fue derruido en 1974. La construcción de la nueva iglesia se finalizó en 1959 y está ubicada en la Plaza de la Safor. Su culto también está destinado a Sant Roc.
Llocnou de Sant Jeroni forma parte del Paisaje de Relevancia Regional del Benicadell, de ahí que sea un espacio de protección medioambiental. El sector meridional del término constituye la principal reserva de bosque, en los parajes montañosos dels Arenals, La Font Cavada, La Mallada de Turís, Els Forcalls, La Carena, Els Clots, El Racó de l’Escaló, La Cuta y L’Ombria. El sendero de pequeño recorrido PR-CV-400, denominado “Llocnou, del Vernissa a la Cuta” atraviesa parte de los parajes del término, además de adentrarse en Terrateig, Vilallonga y Castellonet de la Conquesta. Posee una longitud en torno a 12 km y dispone de una variante que permite alcanzar la cima de la Cuta.
