Villargordo del Cabriel es un municipio de la comarca de La Meseta de Requena-Utiel situado en el extremo occidental de la provincia de València. De hecho, en su término se halla la pedanía de Contreras, un poblado de origen obrero, situado en el límite con la vecina Castilla, que ostenta el título de núcleo habitado más al oeste de nuestras tierras. El río Cabriel constituye una frontera natural entre Villargordo del Cabriel y Minglanilla (Cuenca). El resto de límites de su término corresponden, al norte, con Mira, Cuenca, Camporrobles y Fuenterrobles; al sur y al este, por su parte, con Venta de Moro.
Un origen ligado al Camino Real
El actual núcleo poblacional parece tener su origen en la denominada Venta Nueva, situada junto al Camino Real de Valencia a Madrid. Se tiene conocimiento de la existencia de esta venta, al menos, durante el siglo XVI, gracias a la descripción que hace el cartógrafo valenciano Juan de Villuga (1546) en su «Repertorio de todos los caminos de España». Las ventas eran establecimientos situados junto a los caminos que ofrecían servicio de comida y hospedaje a los viajeros, y la Venta Nueva ya aparece en esta obra entre Caudete de las Fuentes y el puente del Pajazo, situación coincidente con la del actual Villargordo del Cabriel.
El Camino Real llegaba hasta esta venta por el camino del Cementerio, y continuaba en dirección al Pajazo por la calle de las Bodegas. El Pajazo (siglos XV y XVI) fue un paso muy concurrido por ser uno de los pocos accesos a las tierras de Castilla, hasta que a comienzos del siglo XVII empezó a utilizarse un nuevo puente construido al sur, en Contreras. La nueva vía, que se bifurcaba en la misma entrada del actual pueblo, siguiendo las calles de Serrano Larrey y del Charquillo, acabó por imponerse.
Alrededor de este nuevo camino surgió con los años un pequeño núcleo poblacional con unos 200 habitantes en 1699, que, de acuerdo con algunas cartografías de la época, pasó a llamarse Villanueva (1652) o Villa Nueva (1702).
El 1 de agosto de 1747, los vecinos del pueblo consiguieron tramitar el Real Privilegio de Villa que les permitía constituirse como entidad independiente respecto a Requena. Esta segregación supuso también un cambio en el nombre del pueblo que, desde hacía ya algún tiempo, venía conociéndose como Villargordo de Requena. El topónimo fue sustituido por el actual, Villargordo del Cabriel.
La expansión urbana de Villargordo del Cabriel
Durante siglos, Villargordo del Cabriel debió de ser poco más que un pequeño caserío perteneciente al alfoz de Requena. Pero, tras su emancipación, entrará en una pequeña etapa de bonanza y expansión demográfica gracias, sobre todo, a la puesta en cultivo de sus tierras. Pese a que las tierras que componían el alfoz de Requena pertenecieron administrativamente a Castilla hasta 1851, siempre estuvieron muy vinculadas económicamente al Reino de Valencia. A partir de este año, las poblaciones situadas en el Altiplano de Requena finalmente se agregaron a la provincia de Valencia. No obstante, las costumbres y tradiciones del pueblo de Villargordo continuaron siendo principalmente castellano-manchegas.
Su casco antiguo descansa sobre una pequeña elevación a 870 metros de altitud. Todavía hoy es muy reconocible, con calles estrechas y retorcidas y con numerosos callejones sin salida. Lo situamos, como se ha comentado, en las inmediaciones de la calle Serrano Larrey (Camino Real de Contreras), en la parte alta del actual núcleo poblacional. Junto al viejo camino, se encuentra la iglesia parroquial dedicada a San Roque, de la primera mitad del siglo XVIII, santo en honor del cual se celebran en agosto las fiestas patronales.
La construcción de la carretera de las Cabrillas (actuales calles de Utiel y la Carretera), a mediados del siglo XIX y que discurría por una cota más baja, atrajo hacia ella el crecimiento urbano. Se ubica en sus proximidades la plaza de la Fuente. Se conserva en la calle de la Carretera, a la altura de la Plaza de la Fuente, el abrevadero de caballos de los viajeros que pasaban por el pueblo.
Población en retroceso y economía vitivinícola
Durante las primeras décadas del siglo XX se experimentó un incremento poblacional relacionado con la bonanza económica de la viticultura. En 1900 había 1.372 habitantes, y en 1920, 1.652 vecinos. La construcción del embalse de Contreras atrajo mano de obra que hizo crecer de nuevo la población, que llegó a alcanzar 1.857 habitantes en 1960. Finalizadas las obras, una gran parte de los trabajadores emigró, a excepción de una pequeña colonia que atendía la fábrica de cementos Portolés, el poblado obrero de Contreras. En 1970 la población se redujo a 1.519 habitantes. Desde entonces la población ha continuado reduciéndose merced al éxodo rural, común en municipios del entorno. En 2020 residen 582 habitantes.
Su economía está basada en la agricultura. Sin embargo, el relieve característico de este municipio nunca le ha permitido cultivar más allá de una tercera parte del mismo, fundamentalmente en el sector oriental. En 1949 se creó la Cooperativa Vinícola San Roque, que produce vinos fundamentalmente a partir de cuatro variedades de uva: la bobal, que supone un 90%, la tempranillo, la macabeo y la garnacha. La vid es el cultivo predominante en el municipio, con 1.600 hectáreas, a gran distancia del almendro, con 420; el olivo, con 80; y los cereales, 190 ha.
Un patrimonio cultural diverso, ligado al territorio
Uno de los atractivos del municipio es su rico patrimonio histórico y, en particular, los restos de diferentes acontecimientos bélicos, las guerras de Sucesión, Independencia, Carlistas y Civil. Llama la atención de la existencia de trincheras y búnkeres. Hoy en día Villargordo ha apostado por el turismo de interior y sus principales empresas se dedican al sector servicios, con una oferta que combina la historia y los deportes de aventura. Las viejas ventas han dado paso a 3 casas rurales, un hotel y un camping y suelen concentrar la ocupación en agosto, coincidiendo con las Fiestas Patronales en honor a San Roque.
En el norte del municipio, en la rambla de Canalejas, se localiza el manantial de las Salinas de Villargordo, de donde proviene el agua de la población. Estas salinas gozaron de sus mejores tiempos a mediados del siglo XIX, y estuvo en funcionamiento hasta 1991.
Destaca el embalse de Contreras, construido en los años sesenta del siglo XX e inaugurado en 1972. Aprovecha la confluencia de los ríos Cabriel y Guadazaón. Se trata de un paisaje atractivo para los visitantes, pues su obra llama la atención por la altura de la presa, próxima a los 130 metros.
Las rutas de senderismo de Villargordo del Cabriel permiten recorrer su término y apreciar buena parte de su patrimonio. Destacan los Pequeños Recorridos PR-CV 174 (Salinas continentales y río Cabriel) y PR-CV 299 (Cuchillos de Contreras), así como la oferta del Parque Natural de las Hoces del Cabriel, y el GR-238, Ruta del Vino.
PASO A PASO.
1 Iglesia parroquial de San Roque
2 Bodega Cooperativa
3 Plaza de la Fuente
4 Abrevadero de caballos 5 Ayuntamiento de Villargordo del Cabriel.
