Ubicada a 945 m.s.n.m., forma parte de la comarca de l’Alcalatén, si bien históricamente de la comarca del Maestrat. Se extiende a lo largo de 35,6 km2. La capital municipal se localiza a 55 km de Castelló y a 120 de València. El principal acceso por carretera es la CV-170, que proviene de la Pelejaneta (CV-15) y que sube a través del Coll de la Bassa (500 m) hasta Atzeneta del Maestrat. Desde esta última población se toma la CV-169 hacia Benafigos y, tras pasar el pueblo, sigue hasta el Coll del Vidre (1.056 m) y continúa hacia Vistabella del Maestrat. El Coll del Vidre marca el mojón trifinio con Vistabella del Maestrat, al oeste, y Atzeneta del Maestrat, al sur; el río Montlleó lo separa de Atzeneta del Maestrat, al este, y de Culla, al norte.
La montaña castellonense, referencia física
Gran parte de su término, que se encuentra al NE del Macizo de Penyagolosa, es quebrado y montañoso. Sus principales alturas son el Tossal del Vidre (1.091) y la Pena-roja (1.077). El río Montlleó discurre muy encajado y su curso forma continuos meandros. Sus principales barrancos afluentes son l’Hortissella, la Figuera y la Redonda y, al sur, la Cormana y la Garrovera, que forman la Rambla de Benafigos antes de confluir en el río Montlleó.
Benafigos forma parte de la unidad física de las muelas y páramos del Maestrat, donde abundan las montañas de cima llana (Pla de Benafigos, Lloma de Benafigos, Pla de la Creu), delimitadas por profundos cañones, como los del río Montlleó: entre el Pla de la Creu y el mencionado cauce hay una caída de 550 m de altitud en solo 650 m de distancia. Entre el Pla de Benafigos y el cauce del Montlleó solo hay 760 m de distancia y un desnivel de 500 m. La parte oriental es llamada el Sòl del Terme, porque es la más baja, y forma parte del Pla d’Atzeneta-Meanes, que a su vez se encuentra en el corredor más occidental del Maestrat (Atzeneta-Catí).
Benafigos posee un clima continental, con lluvias en otoño y primavera, tormentas en verano, y algunas nevadas en invierno. Su temperatura media anual es de unos 13 grados C y su precipitación media anual de unos 700 litros. Dada su altitud, es más más frío que Atzeneta y menos que Vistabella. Así lo recoge el dicho local “Si a Benafigos fa fred, a Vistabella ja no queda ningú dret”. La mayor parte del término está cubierto de prados, matorral y bosques de pinos y carrascas; una décima parte de su término es apto para el cultivo.
Historia y población
El topónimo Benafigos deriva de “bena” (del latin pinna, peña) y “figos” (del latín ficus, higuera): la Penya de la Figuera. Existe actualmente en su término el topónimo Barranc de la Figuera y Mas de la Font de la Figuera, lo que denota la secular existencia de este árbol antaño y hogaño. Aunque el origen del topónimo Benafigos es latino, las primeras referencias al lugar son de 1225, cuando Jaume I confirma a Ponç de Torrella, obispo de Tortosa, la futura delimitación del mismo, donde se incluye Benafigos. Entre 1303 y 1319, la Setena de Culla –de la que formaba parte Benafigos– formó parte de la Orden del Temple, pero tras su eliminación, pasó a manos de la Orden de Montesa, que perduró hasta la primera mitad el siglo XIX.
La población siempre fue escasa: 30 vecinos en 1713 (unos 125 habitantes). A lo largo del siglo XVIII crece la población y alcanza 282 habitantes en 1786 y 674 en 1877. El máximo demográfico data de 1920 con 985 habitantes y desde entonces no ha dejado de perder población: 334 en 1981. La mayoría de los emigrantes se instalaron en el área de Barcelona o en la Plana de Castelló. Actualmente Benafigos forma parte de aquellos municipios castellonenses con escasa población: en 2020 residían 146, de los cuales 95 en el núcleo urbano, 7 en la Partida de Dalt, y 44 en la Partida de Baix. El poblamiento diseminado en masías, hasta 1970, todavía suponía la mitad de la población.
Economía tradicional, patrimonio y turismo
La agricultura se extiende por unas 340 hectáreas (10% del término), casi todas en la partida de Baix o Sòl del Terme que, por su menor desnivel, es la más apta para cultivar. Está integrada por almendros (188), olivos (97) y avellanos (36). Se observa una incipiente introducción de la trufa. Gran parte de la agricultura es para autoconsumo, aunque una minoría de los productores venden su cosecha. La oferta turística deriva principalmente de las rutas y senderos cercanos a Penyagolosa y al río Montlleó. Hay varias casas rurales y restaurantes. Aunque en verano Benafigos es destino de numerosos visitantes –sobre todo gente vinculada familiarmente con el pueblo- que buscan el benigno clima veraniego local, en invierno la imagen de la población es de pocos habitantes, que viven mayoritariamente de su jubilación.
Entre su patrimonio cabe destacar la Iglesia de Sant Joan Baptista, del siglo XIII, Bien de Relevancia Local. De estilo gótico, fue remodelada durante el siglo XVIII. En 2003 fue restaurada la fachada. Su exterior posee aspecto de fortaleza, posiblemente debido a que se construyó usando parte de los lienzos de la muralla. En la entrada del pueblo, la Ermita del Sant Crist del Calvari es de 1749. Situado a 1,3 km del pueblo y en un bello entorno natural, el santuario de la Mare de Déu de l’Hortissella, de 1566, está dedicada a la patrona de Benafigos, la Mare de Déu de l’Hortissella. Desde el GR-7 parte el sendero de PRV-75 que discurre hacia Benafigos, y al santuario de la Estrella.
