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Gustavo Gimeno «graba» a Francisco Coll

El director, apóstol de la música de su paisano compositor, borda un trabajo que fascina y toca el alma.

Gustavo Gimeno «graba» a Francisco Coll

Quizá jamás la Comunitat Valenciana haya tenido una presencia internacional tan amplia y destacada como hoy. Y en el liderazgo de este conjunto de intérpretes y compositores figuran el director de orquesta Gustavo Gimeno y el compositor Francisco Coll, ambos nacidos en València, el primero en 1976 y Coll en 1985. Ambos estrellas rutilantes de la escena musical. Ahora, director y compositor coinciden en un disco monográfico publicado por el sello holandés Pentatone, en el que Gimeno dirige algunas de las principales obras de Coll. Como coprotagonistas del cedé, la violinista moldava Patricia Kopatchinskaya y la Orquesta Filarmónica de Luxemburgo, de la que Gimeno es director titular desde 2015.

«No tengo palabras para expresar mi gratitud a las personas extraordinarias que han hecho posible este proyecto», escribe Coll en el cuadernillo que acompaña el disco. «Estoy inmensamente agradecido a Gustavo, Patricia, la OFL y Pentatone por haber aunado sus fuerzas para que esta grabación se haya hecho realidad». «Las obras seleccionadas», prosigue Coll, «permiten seguir mi camino, desde la precoz Aqua Cinerea hasta mi reciente Concierto para violín».

Efectivamente, el disco traza un itinerario asombroso desde los comienzos del compositor valenciano, cuando con apenas 19 años compone su «opus 1», Aqua Cinerea, que aquí se escucha en versión revisada en 2019, hasta el recién estrenado (febrero 2020) Concierto para violín, «una especie de retrato musical de Patricia [Kopatchinskaya]», dice el compositor valenciano de esta obra cumbre del género de entre las nacidas en el siglo XXI y en todos los siglos. En medio, las atrevidas y centelleantes Four Iberian Miniatures, de 2014, para violín y orquesta de cámara, en las que a diferencia de la manera fallesca del «folclore imaginario», Coll, apasionado del flamenco y de la mejor música popular española, plasma «una especie de espejismo» que evoca la música flamenca a partir de posicionamientos tan únicos como radicales y novedosos; la rabiosa abstracción de Hidd’n Blue (2009-2011), o Mural (2013-2015), obra maestra total, cuyos cinco episodios bien podrían ser considerados, como apunta Jesús Castañer en los detallados textos que acompañan al disco, «una sinfonía en cinco movimientos».

Escribe Francisco Coll en el mismo cuadernillo que su evolución «como compositor y ser humano» sería «incomprensible» sin Gustavo Gimeno, Patricia Kopatchinskaya (PatKop) y la Filarmónica de Luxemburgo. Son ellos precisamente los pilares de este disco insólito y fascinante. Gustavo Gimeno, cuyo compromiso con la música contemporánea siempre ha marcado su carrera, ha defendido, promovido y estrenado la música de Coll por medio mundo y el otro medio también. El virtuosismo técnico, la clarividente visión estética y la honestidad con las que el director español aborda cualquier música le convierten en artífice ideal de la creación compleja y clara, directa y cargada de infinitas aristas y extremos de su paisano compositor.

La Filarmónica de Luxemburgo, tan competente en menesteres contemporáneos -recuérdese la integral Xenakis que grabó a principios de siglo con Arturo Tamayo- se crece bajo el gobierno de Gimeno hasta coronar versiones que son referencias ideales. Patricia Kopatchinskaya, grande incuestionable del violín del siglo XXI, más que la solista del Concierto de violín de Coll, es ella misma el concierto. Coll ha cuajado una composición-retrato hecha a su imagen y semejanza. PatKop ejerce como musa y solista increíble de una música cuyas titánicas exigencias técnicas y anímicas la convierten en difícil de imaginar en otro violinista.

Gustavo Gimeno, apóstol de la música de Coll, borda un trabajo que más que maravillar y ser ejemplo por su perfección y maestría, fascina y toca el alma. Música excepcional excepcionalmente servida y grabada. La escrupulosa calidad técnica de la sofisticada toma de sonido, está en consonancia con semejante derroche de excelencias. Disco imprescindible. Un hito de la discografía contemporánea. De la música «clásica» y de todas las músicas.

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