Un incidente con amenazas destapa la falta de seguridad en centros de salud mental

Un incidente de cierta gravedad provocado en los últimos días por un hombre que se presentó en el centro de salud mental de Sueca forzó ayer la denuncia de UGT sobre la falta de seguridad en las sedes de Sueca, Alzira y Carlet. Desde la central sindical aseguraron que el incidente de Sueca no ha sido el único en los últimos tiempos, pero al parecer sí el de mayor gravedad.

Una de las trabajadoras del centro de Sueca fue amenazada y acorralada por un enfermo que profirió amenazas de muerte en varias ocasiones, lo que provocó momentos de mucha tensión y pánico por la dificultad de controlar a esta persona, que aseguró en varias veces que había llegado ya el día «de matar» y que eso le iba a producir «placer».

Según explicaron, el incidente se prolongó durante unos 20 minutos y el individuo tuvo a una trabajadora acorralada.

Desde UGT señalaron que el incidente de Sueca puso en peligro la integridad de varias personas después de que un hombre, al parecer con las facultades mentales alteradas y sin tratamiento profiriera amenazas de muerte a varias personas del centro, que tuvieron que usar sus móviles para llamar a la Guardia Civil, según relataron, aunque finalmente ellos mismos redujeron a esta personas y no fue necesaria la intervención policial.

Alarma en pacientes y plantilla

Desde UGT señalaron que se trata de pacientes en algunos casos «potencialmente peligrosos» y que los usuarios y trabajadores no tienen ningún tipo de seguridad. Ello ha creado alarma entre los pacientes y los trabajadores del centro, según indicaron.

Desde UGT exigieron la adopción de medidas inmediatas antes de que ocurra «una desgracia», según señalaron.

No estigmatizar la enfermedad

En cambio, desde el departamento de salud de la Ribera, del que dependen los centros de salud mental de Alzira, Sueca y Carlet señalaron ayer que la situación de peligro para la integridad de los profesionales del centro de salud de Sueca que ha denunciado UGT, fue una agresión verbal de carácter aislado en este departamento y negaron tajantemente que se produzcan casos con regularidad.

Además, aseguraron que el departamento de salud sigue las indicaciones de la consellería para la protección de sus profesionales y pacientes y desde el año 2006, el Departamento de Salud de la Ribera cuenta con un protocolo de actuación ante agresiones que marca las pautas a seguir a los profesionales en caso de agresión. Para ello, los profesionales han recibido formación específica. Po otra parte desde el departamento de Salud de la Ribera señalaron ayer que no se debe estigmatizar la enfermedad mental, relacionándola con actos agresivos o criminales, lo que en ningún caso ayuda a la curación de estos enfermos.