Las obras tardarán más de dos años en acabar

Su aspecto exterior de fortaleza oculta sus debilidades interiores producto de agresivas intervenciones, que incluso cambiaron el nivel de los forjados de las diferentes plantas, algunos de los cuales amenazan ruina. La Torre de las Palomas del antiguo monasterio de la Murta en Alzira data de mediados del siglo XVI y es el elemento que mejor se conserva de este conjunto histórico. En 2010, el Consell anunció un proyecto que pretendía devolverle la imagen de fortaleza separada del resto de edificios que tenía cuando se erigió, una actuación valorada en 884.000 euros y que permitiría que, décadas después, la Murta fuera visitable. El plazo de ejecución previsto entonces era de dos años, por lo que el anuncio hecho esta semana por Marta Alonso alarga todavía más la rehabilitación del monumento. levante-emv alzira