Las principales entidades agrícolas de la Ribera facturan 200 millones al año
El sector reclama aumentar la inversión en modernización e investigación para garantizar el futuro
carlos alós | alzira
El peso del cooperativismo en la Ribera es crucial en el sostenimiento de la economía. De hecho, los expertos mantienen que las cooperativas están siendo el principal colchón en el que se ha apoyado la economía comarcal en los largos años de crisis y recesión. Y los datos oficiales les dan la razón.
Las principales entidades agroalimentarias con sede en la Ribera facturan al año 200 millones de euros, que suponen un auténtico balón de oxígeno para la comarca, y que se elevan a 250 millones si se suma el volumen económico que genera Agriconsa, que aunque no es propiamente una cooperativa facturó desde su sede en Algemesí 43 millones de euros en 2012 en la producción de zumos no concentrados a partir de productos frescos del campo y conservas.
La economía de la comarca no se entiende sin las cooperativas y los miles de jornales que dependen de ellas. En algunos casos, como en Sueca, en Guadassuar o en Alfarp son la primera empresa en volumen de facturación del municipio y en la mayoría de los casos, como en Algemesí, Carlet, l´Alcúdia o Alginet, se sitúan entre las cinco primeras en volumen económico. Copal de Algemesí, con más de 40 millones de euros anuales, y Sant Bernat de Carlet y Canso de l´Alcúdia por encima de los 30, son las más importantes. Tras ellas, la Agrícola de Alginet con 22 millones de euros y las cooperativas de Sueca, que en conjunto también superan los 20 millones de euros anuales.
Por eso, el sector reclama la necesidad de aumentar la inversión en la modernización de cooperativas. Hace unos meses, el presidente de la Copal de Algemesí, José Vicente Torrent, reclamaba ante el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, que el Consell «realice el mismo esfuerzo que hacemos nosotros para luchar por este sector, que apueste por la investigación, se invierta en formación para que se pueda realizar un relevo generacional y se tengan en cuenta nuestras iniciativas», una reclamación que comparte todo el sector. «Las cooperativas son el motor de nuestra economía», resume Torrent.
Por su parte, el presidente del consejo sectorial nacional de frutas y hortalizas de cooperativas agroalimentarias, el alcudiano Cirilo Arnandis, también asegura que las cooperativas «han demostrado durante años su capacidad para seguir generando empleo y actividad económica» y también cree que la ley de integración es un de los asuntos que el sector tiene necesidad de abordar.
Suscríbete para seguir leyendo
- Los arrastres de la dana cubren con hasta 1,30 m de lodo el yacimiento subacuático con restos romanos
- Compromís recupera la alcaldía de Castelló
- El calvario de la fallera mayor de Albalat: de la ilusión a la depresión
- La mítica discoteca Banana's sigue buscando dueño
- La alcaldesa de Castelló dimite para cumplir el pacto
- El alcalde de Cullera 'bautiza' dos nuevos negocios
- Un incendio industrial colapsa una empresa de envasado de aceite en Algemesí
- Una administración de Alzira entrega 4,5 millones: 'Estamos muy contentos porque hemos hecho a un vecino millonario